La Estrategia de Especialización Inteligente de Navarra, conocida como S3, ha recibido el visto bueno de los expertos. El documento, que fue presentado en 2016 y que recoge las líneas clave para el desarrollo económico de la Comunidad foral en los próximos años, ha sido analizado por un equipo de trabajo de la Universidad Loyola Andalucía y la consultora Zabala Innovation Consulting, que ganaron la licitación correspondiente para la realización de una evaluación externa.
Ahora, el grupo liderado por Susana Elena Pérez, especialista en estrategias inteligentes, ha presentado los resultados. Y éstos no pueden ser más satisfactorios para Navarra. “Es una estrategia excelente”, confiesa la responsable del análisis. Y lo hace con conocimiento de causa: “He revisado muchas a nivel nacional y muchísimas más a nivel europeo y puedo decir que es una buena estrategia. Obviamente, siempre hay cosas que se pueden mejorar, pero en conjunto es muy positiva”.
Además, esta experta aplaude la decisión del Gobierno foral de hacer una evaluación externa. “Ha sido pionera en ponerse en manos de otros y es, a la vez, un ejercicio de responsabilidad y de valentía someterse a un análisis crítico y aceptar las críticas”.
El informe recién presentado es fruto de ocho meses de trabajo, de mayo a diciembre de 2017; tiempo en el que el equipo de analistas ha revisado todos los documentos “desde el Plan Moderna hasta la S3”, ha realizado veinte entrevistas anónimas y en profundidad “para captar si había opiniones o situaciones que no se reflejaban en el papel” y ha analizado buenas prácticas de otras regiones europeas.
La Universidad Loyola Andalucía y Zabala Consulting se hicieron con la licitación para realizar una evaluación externa de la estrategia
Las conclusiones arrojan un “cumplimiento pleno” de las directrices fijadas por la Comisión Europea “en 20 de los 24 aspectos analizados”, apuntan desde Sodena, y “parcial” en los restantes cuatros. No obstante, el informe también incluye ciertas recomendaciones para seguir mejorando.
DESDE EL DIAGNÓSTICO HASTA EL SEGUIMIENTO
El equipo de trabajo ha analizado, por separado, las cinco etapas que han llevado a la confección de la Estrategia de Especialización Inteligente de Navarra: el diagnóstico, la formulación de las prioridades, el sistema de gobierno, los instrumentos y medidas de implementación y el seguimiento y evaluación. Por un lado, ha puesto el ojo en el diagnóstico de la situación de partida. “Uno de los requisitos fijados por la Comisión Europea en esta primera etapa es que las prioridades estratégicas no nazcan del Gobierno sino a través de grupos de trabajo multidisciplinares, con participación público-privada, con asociaciones, con empresas, con agentes intermedios, universidades, centros tecnológicos…. Y, efectivamente, en Navarra es evidente, hay evidencia empírica, que ha sido así. Nosotros hemos revisado toda la documentación y este requisito se cumple con creces, no hay duda de ello”, argumenta Susana Elena Pérez. 
El siguiente paso ha sido analizar las prioridades marcadas dentro de la estrategia y que hacen referencia a seis sectores concretos: automóvil y mecatrónica, cadena alimentaria, energías renovables y recursos, salud, turismo integral y, por último, industrias culturales y creativas. “No entramos a valorar si son las adecuadas o no. Eso compete al territorio. Pero sí hemos querido valorar si están bien estructuradas, si son limitadas y no especialmente amplias, y si están bien formuladas”, añade la experta. Para el equipo de trabajo, también esta labor se ha realizado correctamente.
Si bien, han lanzado varias recomendaciones, con el objetivo de hacer seguimiento de ellas y, en su caso, corregirlas en un futuro si los resultados no son los previstos. “Creemos que en aquellas prioridades que son emergentes, que son nuevas, como el turismo integral o la industria creativa, es importante hacer un seguimiento muy pormenorizado, para ver si el potencial se está plasmando en algo real y, si no fuera así, reformularlas”, explica. “Hay que tener en cuenta que la S3 es una estrategia viva y hay que tener cuidado en aquellas prioridades en las que Navarra no ha tenido históricamente una potencialidad”.
Para la elaboración del informe, liderado por Susana Elena Pérez, se han invertido ocho meses, se ha analizado documentación y se han realizado veinte entrevistas en profundidad
A LARGO PLAZO
Aunque la S3 tiene como horizonte el año 2020, lo cierto es que no pretende ser una estrategia a corto plazo. Todo lo contrario. “No se trata de terminarla entonces, sino de revisar en ese año cómo ha ido el cumplimiento y las previsiones. Lo que se busca es monitorizar los resultados. Y para ello se han establecido una serie de indicadores anuales, otros con la vista puesta en 2020 y otros más en 2030. Es una forma de dar estabilidad a la estrategia sin perder el control en el corto-medio plazo”, asegura esta experta.
No obstante, también reconoce que para lograrlo, es preciso contar con un consenso político que dé continuidad a esta iniciativa. “Cuando cambian los gobiernos, la tendencia es destruir lo anterior y crear algo distinto. Eso es pernicioso para el sistema”, advierte. Quizás por ello, el equipo de trabajo ha recibido con agrado el hecho de que la S3 navarra no parta de cero. 
“Antes de la Estrategia de Especialización Inteligente estaba en Navarra el Plan Moderna. Tenía sus deficiencias, pero era un punto de partida. Por eso valoramos positivamente que no se destruyera. Se han asumido las recomendaciones que en su día se hicieron y se ha construido sobre los pilares de Moderna. Eso es lo que hay que hacer”.
Para Susana Elena Pérez la clave está en valorar de dónde surge esta estrategia, cuáles son sus cimientos. “Pueden realizarse cambios en la estrategia, pero hay que tener en cuenta que este documento surge de un proceso en el que han participado todos los agentes socioeconómicos de Navarra. Está constituido sobre una base social, no viene dictado por el Gobierno, y no tendría sentido que se destruyera completamente”.
A continuación, para los interesados, ponemos a su disposición, el informe de evaluación externa de la S3 realizada por la Universidad de Loyola Andalucía y Zabala Innovation Consulting.
