Que hay días internacionales ya para cualquier cosa es algo que veníamos sospechando de un tiempo a esta parte. Lo que no nos esperábamos es existiera el Día Internacional del Beso.
Pues sí, se acaba de celebrar (fue este 13 de abril) y su origen no puede ser más iconoclasta: se celebra desde que una pareja tailandesa se diera lo que hasta el momento se considera «el beso más largo de la historia». Las 58 horas que estuvieron besándose Ekkachai y Laksana Tiranarat en el año 2011, en un concurso en San Valentín, generó esta conmemoración y, aunque lo mejor sea la práctica, los besos también se escriben y se celebran de diferentes formas en muchos lugares del mundo.
En un beso, sabrás todo lo que he callado (Pablo Neruda). En la estación Warrington Bank Quay, en Londres, las parejas tienen prohibido despedirse con un beso en la entrada de la estación. Los taxistas se quejaron de que los enamorados obstaculizan la zona de descarga besándose y para evitar esta situación, se ha acondicionado un Área para besos en el estacionamiento.
Bésame y verás lo importante que soy (Sylvia Plath). En muchos países europeos y latinoamericanos, los besos son una forma de saludo. Mientras que los españoles usamos dos para presentarnos, en Suiza y Bélgica se suelen dar tres, seis en algunas zonas de Rusia y cero en China y Japón.
El amor es el deseo infinito del beso eterno (Nieves Xenet). El promedio de tiempo que pasaremos besando son 20,160 minutos, lo que equivale a dos semanas enteras de nuestras vidas. Además, cada vez que damos un beso, se activan 146 músculos, incluyendo 34 faciales y 112 que involucran la postura, quemamos calorías, fortalecemos nuestro sistema inmunológico, aliviamos el dolor y prevenimos caries.
Todos somos mortales hasta el primer beso y la segunda copa de vino (Eduardo Galeano). La firma de diferentes tratos en la Edad Media se hacía con beso entre los participantes, acompañado de una firma en forma de “x”, ya que la mayoría no sabía escribir para firmar un acuerdo.
Lo bueno de los años es que curan heridas, lo malo de los besos es que crean adicción (Joaquín Sabina). El Día internacional del Beso no significa evitar los dulces sino saber escoger aquellos que cuidan nuestra boca y nuestra salud. Una buena elección son las golosinas saludables 0%, para darse un capricho sin preocupación sea el día que sea. Además, son perfectas para deportistas e incluso para los niños, ya que no producen caries.
Como daba besos lentos, duraban más sus amores (Ramón Gómez de la Serna). Por el simple hecho de besar a otra persona, podemos percatarnos de si nos emociona estar a su lado o no. Y para que surja la ocasión, siempre ayuda estar en un sitio que invite a ello. Los mejores planes románticos para conquistar suelen ser un viaje, una cena romántica o cualquier detalle personal que aumente la conexión entre dos.