CCOO denunció ante Inspección de Trabajo la supuesta cesión ilegal de personas trabajadoras por parte de Glovo a otras empresas subcontratas, «que actúan como tapadera de la matriz con el objetivo de incumplir la legislación laboral básica». Este movimiento llega tres meses después del anuncio, obligado por los tribunales, de laboralización de la plantilla por parte de la marca de reparto a domicilio.
«Glovo incumple el artículo 43 del Estatuto de los Trabajadores, puesto que se trata de una mera puesta a disposición de la plantilla de la empresa cedente a la empresa concesionaria. Además, tal y como ha podido conocer este sindicato, las empresas cesionarias carecen de actividad y organización propia. De hecho, las dos empresas tapadera que actúan en Navarra lo hacen bajo la app de Glovo y es la propia empresa matriz la que suministra el material necesario para desempeñar el trabajo», indicó CCOO.
A su juicio, Glovo pretende «limitar los derechos adquiridos» por parte de la plantilla. «La antigüedad, por la que los trabajadores ven su salario mejorado según los años acumulados, se esfuma. Los trabajadores obligados a este movimiento también están sufriendo un empeoramiento en sus horarios y en sus jornadas. Además, al ser cambiados de empresa, se produce de facto un despido colectivo de 279 personas trabajadoras que el sindicato está dispuesto a reclamar. La empresa matriz, en su afán por abaratar los costes laborales, no aplica el convenio colectivo de referencia», apuntó el sindicato.

En paralelo, CCOO defendió que este movimiento, «además de ser ilegal y de menoscabar en los derechos laborales de la plantilla, supone una afrenta al derecho de la representación sindical de las personas trabajadoras». «Divididos los trabajadores en varias empresas, la capacidad de organización de las plantillas es menor y, en consecuencia, el contrapoder que ejercen los sindicatos contra la autoridad de la empresa se ve deteriorado», lamentó.
MAYOR CONTROL
Además, el sindicato anunció también que estará «vigilante» para que «las empresas pantalla creadas por Glovo no obtengan las ventajas fiscales con las que cuentan las compañías recién creadas en la Comunidad foral». En este contexto, CCOO reclamó un mayor control a las autoridades sobre los movimientos de esta compañía. Para el sindicato, contar con nuevos modelos empresariales que «desprecian la normativa vigente y los derechos de las personas trabajadoras es una ofensiva que afecta al conjunto de la ciudadanía».