Este 14 de noviembre se conocía el nombramiento de Juan Ramón Aramendia como coordinador del Navarra Cybersecurity Center, cuyo objetivo, según describen, “es el impulso al desarrollo de iniciativas en torno a la ciberseguridad” en la Comunidad foral. Quienes seguimos la actualidad en esta materia por su especial relevancia -como en este caso Castañeda & Asociados– sabíamos que era una noticia esperada desde que, en octubre, Juan Cruz Cigudosa, consejero de Universidad, Innovación y Transformación Digital, anunciara la incorporación de una persona encargada de liderar esta iniciativa.
Sin duda se trata de una noticia trascendente porque el centro se convertirá en una referencia para la ciudadanía ante las incidencias en esta materia. En el sector seguros somos testigos directos del daño que están causando los ciberataques, en especial a las pymes. Empresas que en el caso de Navarra son la inmensa mayoría. De las 38.941 empresas con actividad en nuestro territorio a 1 de enero de 2023, solo 66 de ellas emplean a más de 249 asalariados.
Los ciberataques se han convertido en auténtico quebradero de cabeza para muchas de ellas porque se han multiplicado en los últimos años debido a dos razones: la digitalización de las empresas y el teletrabajo. La pandemia aceleró un proceso que, hasta entonces, muy pocas compañías habían incorporado. Sin duda, los cibercriminales encontraron una brecha de seguridad en los trabajadores en remoto, mucho más vulnerables.
Sin embargo, son los ataques a las grandes compañías, como el caso de Air Europa el 10 de octubre, los que saltan a la portada de los periódicos o abren los informativos de televisiones y radios. En el caso concreto de la aerolínea, sirvió para ponerle cifras a este opulento negocio. “La ciberdelincuencia mueve más dinero que el tráfico de drogas y la prostitución -advertía Javier Ruiz en Cadena SER-. Este es el calibre que está adquiriendo una industria con volúmenes de negocio monstruosos”.
El balance de 2022 elaborado por el Instituto Nacional de Ciberseguridad recopila datos alarmantes: el INCIBE gestionó casi 119.000 incidentes (un 8,8 % más que en 2021) y solo en Navarra detectó 36.538 dispositivos vulnerables (es decir, que “pueden estar afectados por algún software malicioso, estar mal configurados o expuestos en Internet de forma no deseada”).
En 2022, el Instituto Nacional de Ciberseguridad detectó 36.538 dispositivos vulnerables en Navarra
Hoy somos mucho más conscientes del problema al que nos enfrentamos. Y, probablemente, con toda la información que manejamos, sepamos qué pasos dar si somos objeto de un ciberataque: denunciar a la policía y ponerse en contacto con el INCIBE.
Aunque esto lo tengamos interiorizado, quizás la ciudadanía desconozca la labor del seguro en este campo, a pesar de que las grandes compañías del sector ya intuyeron el tsunami que se avecinaba y comenzaron a ofertar sus productos hace más de dos décadas. En la actualidad, las pólizas han ido evolucionando para dar cobertura a los ataques más sofisticados y adaptarse a las necesidades de los clientes.
Como sucede en otros siniestros, estas pólizas no evitan el ataque, pero sí amortiguan el golpe. Sin pretender ser alarmista, no tener contratado un seguro supone, en el peor de los casos, echar el cierre. O lo que es más frecuente, enfrentarse a consecuencias indeseadas: pérdida de beneficios, indemnizaciones, sistemas dañados que hay que costear o multas por vulneración de protección de datos. Ahí es donde un ciberseguro actúa como parapeto.
Por estos motivos, este producto asegurador es una herramienta complementaria a otros “cortafuegos” y hoy se ha convertido en una inversión de futuro. En nuestra correduría de seguros, el número de consultas acerca de estas pólizas se han incrementado en este último año. Ir de la mano de centros como el Navarra Cybersecurity Center y de un mediador de seguros será la mejor respuesta a la principal amenaza que sufren hoy autónomos y empresas.
María Castañeda
Gerente de Castañeda & Asociados Correduría de Seguros y presidenta del Colegio de Mediadores de Seguros de Navarra