La legislatura actual ha sido muy intensa en lo que a la relación Comunidad Foral de Navarra/Estado ha repercutido. Pero si algo ha quedado claro tras este periplo cargado de incertidumbre ha sido que es una cuestión de PACTO.
Creo que no es exagerado decir que todos los conflictos que podían surgir en esta materia han surgido en el período 2011-2015.
La inspección a VAESA dio el pistoletazo de salida de esta legislatura enfrentando a la Comunidad Foral a un proceso largo y complejo, con una espada encima de mil quinientos millones, ochocientos, cien o CERO. Pues bien, ha sido CERO. No sin trabajo, sin esfuerzo, sin desvelos y con ACUERDOS.
Lo más importante que otorga el Convenio es esa posibilidad de pactar con el Estado, que es lo que se ha hecho. Un tema complicado que no tenía fácil solución, que supuso recursos de UPyD, del Gobierno Central y un cuestionamiento nacional de si el Convenio Económico era un privilegio.
En esta nueva legislatura hay que negociar un nuevo quinquenio y la negociación será compleja, pero sí que la inspección de VAESA ha dejado claro que la actual fórmula que calcula los Ajustes de IVA no funciona y me atrevería a decir que no ha funcionado nunca.
El IVA grava el consumo y lo más sencillo a futuro para el cálculo de los ajustes de IVA será buscar una variable que mida el consumo y que Navarra haga su ingreso total de IVA (Recaudación directa + Ajustes de IVA) en base a una fórmula sencilla que sea una variable multiplicada por la recaudación total de IVA del Estado más los territorios forales. Lo que no puede seguir ocurriendo es que cuanto más se exporta nuestra recaudación total de IVA, más afectada se ve.
El segundo gran problema han sido las sentencias del Tribunal Constitucional, esto ha conllevado una modificación de los artículos dos y seis de la Ley del Convenio, que a muchos no parece satisfacer, pero con dos sentencias del Constitucional, una de ellas estuvo más de once años en la marmita cociéndose y como no podía ser de otra manera, en esta legislatura vio la luz. La siguiente fue un recurso al Impuesto de producción de energía eléctrica, que en siete meses el Constitucional lo resolvió. ¿Y qué dejaron? Una conclusión clara acerca de los impuestos distintos de los convenidos. ¿Qué se ha hecho a este respecto? Modificar la redacción que ha dado lugar a las sentencias. Esto es muy complejo y no es una cuestión solo política, hay una cuestión técnica muy importante detrás de todas estas modificaciones.
¿Cuál es la conclusión? Que la relación Navarra-Estado es un continuo tira y afloja en aras a llegar al mejor acuerdo posible. Esa relación no es un privilegio, es fruto de la Ley Paccionada de 1841 en la que se reconocieron a Navarra unos derechos que fueron refrendados por la Constitución Española de 1978 y desde el Gobierno de Navarra lo que se ha hecho es dar solución en cada momento a los problemas que se han suscitado en esta relación. Relación que se basa en el PACTO, pero que no cabe el calificarla de PRIVILEGIO.
Lourdes Goicoechea Zubelzu
Vicepresidenta y consejera de Economía, Hacienda, Industria y Empleo del Gobierno de Navarra en funciones