El Hotel Santa Ana Tudela ha abierto sus puertas en el Casco Antiguo de la capital ribera. Con una calificación de cuatro estrellas, este proyecto independiente ha sido promovido por cuatro jóvenes riberos: Diego y Gonzalo Oliver, quienes también son directores generales del Grupo Enhol; Guillermo de la Parra; y Manuela Arribas, directora del establecimiento.
La inversión total del proyecto ha ascendido a 3 millones de euros. Y, en la actualidad, el establecimiento emplea a cinco personas, aunque sus responsables esperan ampliar esta cifra en una o dos más.
«El proyecto está pensado para que convivan los huéspedes y los habitantes de Tudela, ya que deseábamos devolver un poco de esplendor al Casco Antiguo»
La puesta en marcha del hotel ha durado alrededor de cinco años debido a «las labores de rehabilitación del edificio y por situaciones macroeconómicas como la pandemia y la guerra en Ucrania», señala a Navarra Capital la propia Arribas.
«Pero los cuatro socios hemos puesto especial esfuerzo y dedicación en que el hotel se materializara. El proyecto está muy pensado para que convivan los huéspedes y los habitantes de Tudela, ya que deseábamos aportar algo a nuestra ciudad y devolver un poco el esplendor al Casco Antiguo. Ya hemos empezado a recibir a nuestros primeros clientes, sobre todo nacionales, ingleses y franceses», explica.
El proyecto ha conllevado la rehabilitación de un antiguo edificio ubicado en el Casco Antiguo de Tudela.
El Hotel Santa Ana Tudela cuenta con diecinueve habitaciones dobles, entre ellas dos suites; cuatro habitaciones conectadas para familias; y otra adaptada para personas con movilidad reducida. Así mismo, posee también espacios dedicados a la restauración y a la organización de eventos, un patio interior y una terraza con vistas «a los monumentos más importantes» de la ciudad. Todo ello en una zona histórica recuperada y conservada, según inciden desde el establecimiento.
LA FILOSOFÍA
«Nuestras instalaciones quieren ayudar al huésped a desconectar para conectar. Así mismo, hemos conectado nuestra propuesta al entorno, sobre todo el río Ebro y las Bardenas. Nuestra zona es cultura y gastronomía, festividades patronales y corazón. Igualmente, hemos querido conservar el edificio patrimonial, y eso es lo que los vecinos más valoran. Están agradecidos de que se mueva un poco el barrio», valora la directora del Hotel Santa Ana Tudela.
El establecimiento ya ha recibido a sus primeros clientes, sobre todo nacionales, ingleses y franceses.
Al mismo tiempo, las instalaciones albergan el restaurante Árido, especializado en una gastronomía «saludable y sostenible» que trabaja con productos de proximidad. De hecho, el local, operado por una propiedad distinta a la del hotel, fue finalista en el I Concurso de España de Pincho de Verdura de Tudela, con su propuesta ‘Puerro del huerto’.
