Hace aproximadamente un mes nos felicitábamos por haber interpretado correctamente el movimiento futuro que iba a desarrollar el par de divisas Euro/Dólar
Los aproximadamente 1,1200-1,1250 habían sido una referencia a partir de la cual nuestra opinión (fuerte opinión) era que se trataba de un momento estratégico para que todos aquellos importadores en dólares se planteasen cubrir sus importaciones para un largo plazo de tiempo (ver artículo anterior) Y en meses más atrás el nivel de referencia que habíamos planteado como adecuado habían sido los 1,1350.
Después de semanas en las que esperábamos una caída que no terminaba de llegar, ésta por fin ha llegado. Hemos visto niveles por debajo del 1,0600, lo cual coincide con la parte baja del canal lateral por el que el Euro/Dólar discurre desde hace casi dos años.
Como vemos, no es necesario ver subidas de tipos de interés en EE.UU. para que “el mercado” ya las anticipe y se posicione. No esperen a las noticias Macro para decidir. Si la economía americana va mostrando fuerza, y se hacen evidentes subidas de tipos, el Dólar seguirá con fuerza. Por otro lado, el Euro se muestra débil respecto a casi todas las monedas, señal de desconfianza en la evolución de su economía y en la deflación que mantiene.
Esta semana ha sido propicia para que los exportadores hayan cubierto una buena parte de sus exportaciones para los próximos meses. De seguro que tendrán en su escandallo un tipo de cambio superior, lo cual les hace estar ganando un buen margen.
Pero… ¿y ahora qué?
En el corto plazo (1-3 meses): nos encontramos en la parte baja del canal lateral comprendido entre los “aproximadamente” 1,0600-1,1400. La “probabilidad” nos dice que lo más prudente sería pensar en un rebote, pequeño o grande, pero rebote.
Se trata de un nivel muy malo para que los importadores decidan. Hay momentos/niveles adecuados, y desde luego este no lo es, ya que aunque la probabilidad de rebote en el corto plazo es evidente, una rotura del canal a la baja podría ser catastrófica para quienes no estén cubiertos para los próximos meses. No obstante, en el caso de romperse los 1,0500 deberían protegerse, aunque el nivel fuese malo, porque obviamente podrá ser mucho peor si no lo hacen. Quizás deberían esperar a ver si los 1,0500 se rompen.
Sin embargo, se trata de un dulce momento para que los exportadores aseguren niveles de 1,0600-1,0700 y retengan el margen que hay entre ese nivel y el tipo de cambio de sus escandallos
En el medio plazo (4-8 meses): el gráfico está indicando una fuerza bajista capaz de romper el canal lateral, e irse por debajo de los 1,0600. De darse esta rotura a la baja, la proyección del movimiento debería alcanzar los 0,97.
Probablemente esto les parezca un escándalo, sin embargo a mí no me parece en absoluto descabellado. De hecho, pienso que se trata del escenario que de momento va a producirse más pronto que tarde.
Mientras tanto, vamos a esperar a ver si se rompen esos 1,0600 o si se produce un rebote.
Los análisis y estrategias planteadas en este y otros artículos del mismo autor representan únicamente opiniones personales, y en ningún caso y bajo ninguna circunstancia, una recomendación de compra o de cualquier otro tipo.
Jorge Labarta
Economista, analista técnico bursátil y autor del libro “Así me hice trader”