Promover el cambio, entendido como competencia, consiste “en la capacidad de gestionar la transición hacia una nueva realidad, intentando que las personas involucradas sean capaces y deseen trabajar en el nuevo contexto definido y conseguir los resultados esperados”, explicó a una veintena de directivos de importantes empresas de Navarra Carmen Melina, coach ejecutivo, licenciada en Psicología, Executive coach PCC por ICF y miembro del equipo de la Escuela Europea de Coaching
Durante el taller se debatió el concepto de que el líder es un impulsor del cambio. “Si no hay cambio, no hay liderazgo, no hay movimiento, solo hay gestión. El liderazgo sin gestión es estancamiento, gestión sin liderazgo es caos”.
Por otro lado, se comentaron las características que debe tener el líder del futuro. “Este debe sobre todo ser impulsor del cambio, pregunta y reta más que da soluciones, carece de toda información, de todo el conocimiento, se muestra vulnerable, y encarna los valores de la organización”, señaló Melina.
RETOS DEL LÍDER
Además, la coach apuntó como retos del líder “facilitar la inteligencia colectiva, crear atmósfera de confianza, generar paradigmas colaborativos, facilitar un clima de participación y transparencia, identificar retos y facilitar el desarrollo de los integrantes de la organización”.
Los directivos trabajaron fundamentalmente en definir la estrategia del cambio, en cuanto a personas, relaciones y sistemas. Y al mismo tiempo se resaltó la importancia de describir y definir la hoja de ruta para el desarrollo de cada persona.
La cuestión es si nos hacemos conscientes de nuestras emociones o no. “¿Somos conscientes de lo que preguntamos, de lo que escuchamos, y sentimos?” Pregunta para reflexionar largamente.