La economía navarra creció en 2024 un 2,7 %, ocho décimas por encima del avance registrado en 2023 y cinco más de lo reflejado en las previsiones del cuadro macroeconómico de septiembre. Los datos provisionales del Instituto de Estadística de Navarra (Nastat) señalan que el PIB repuntó un 0,5 % en el último trimestre con respecto al trimestre anterior y un 3 % en comparación con el cuarto trimestre de 2023. Unos datos que superan las previsiones del Ejecutivo foral y las entidades financieras, pero que evidencian al mismo tiempo un crecimiento inferior en medio punto al experimentado por el conjunto de España (3,2 %).
En concreto, las economías navarra y española siguieron líneas similares en el primer y segundo trimestre y se revalorizaron un 0,9 % y un 0,8 % en el caso de la primera y un 1 % y un 0,8 % en el de la segunda. Pero la Comunidad foral mostró un peor comportamiento en el tercero y el cuarto, con una ligera desaceleración (+0,7 % y +0,5 % frente al +0,8 % estatal en ambos períodos). Esta moderación experimentada en los últimos meses del año, según el Nastat, «deriva del menor dinamismo observado fundamentalmente en la industria».
El consejero de Economía y Hacienda, José Luis Arasti, analizó los datos en rueda de prensa. «Se trata de unas tasas de avance considerables, que certifican que la economía navarra ha seguido manteniendo el pulso en los últimos meses del año», defendió a pesar de reconocer cómo la economía regional terminó en peores niveles que la nacional.
Haciendo la misma comparativa con la Unión Europea, puso en valor la «importante diferencia en la velocidad de crecimiento y una ventaja progresiva en el PIB navarro sobre el europeo», con dos puntos porcentuales por encima del dato de la eurozona.
Así, el crecimiento del PIB «se ha apoyado fundamentalmente en la demanda interna y, especialmente, en el consumo privado, que ha demostrado un extraordinario dinamismo con tasas de crecimiento superiores al 3%». Pero la demanda externa «continúa muy debilitada», y «esta debilidad, unida a un menor consumo en el sector público, explican desde el punto de vista de la demanda el diferencial de crecimiento de Navarra con respecto a España».
Para 2025, las previsiones auguran una ralentización del crecimiento regional y nacional, aunque se espera que la economía navarra siga creciendo (el Ejecutivo navarro y las principales entidades financieras hablan de entre un 1,8 % y un 2,5 %). Una tasa «ligeramente menor a la de 2024, en línea que con la desaceleración prevista en el último cuadro macro del Servicio de Contabilidad Nacional del Departamento de Economía y Hacienda», concluyó el consejero.