El proyecto Isolíneas, basado en líneas diagonales, permeable al tránsito peatonal, que preserva el arbolado y comunica las aceras norte y sur en una plataforma única sin apenas pendiente, ha sido el seleccionado por el jurado como ganador del concurso de ideas para la reforma y reurbanización del paseo de Sarasate. El proyecto, elegido entre las cinco propuestas finalistas, plantea una intervención valorada en 9,13 millones de euros y viene firmado por el equipo Vi17 Arquitectura, en conjunto con OAB Office of Architecture in Barcelona y Okra Landscape Architecten. El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, junto al concejal de Ciudad Habitable y Sostenible, Borja Izaguirre, y la directora de Proyectos, Maialen Ariz, dieron a conocer el fallo.
La propuesta, según informó el Ayuntamiento de Pamplona este viernes, «supone un rediseño completo del paseo» y apuesta «por la plataforma única». Para ello, cambia la topografía del lugar, que abarca 24.000 metros cuadrados incluyendo el propio paseo y las calles aledañas. El proyecto se basa en el trazado de líneas diagonales, separadas cada veinticinco metros, que permiten conectar de forma continua y sin pendientes significativas, de apenas el 1 %, las aceras norte (la de la iglesia San Nicolás) y sur (Banco de España y Correos). Para ello, se prevé reducir la cota en la plataforma central, manteniendo la cota en los accesos a comercios y portales.
La conexión entre los frentes norte y sur a través de la plataforma central se realiza «abriendo pasos entre los parterres», que conservarán su altura original. Pero, en lugar de formar una barrera continua a lo largo del paseo, se dividen en dieciséis zonas verdes, agrupando uno o varios árboles. De esta forma, se crearán pasos peatonales entre el Casco Antiguo y el Ensanche sin afectar al arbolado. Las estructuras de acero actuales se sustituyen por bancadas de madera para el descanso de los paseantes.
LOS ÁRBOLES
De los 77 árboles del paseo, la propuesta «prevé salvar todos». 74 de ellos, casi el 97 %, se mantendrán en su ubicación original «protegiéndolos de las posibles afecciones que pudieran tener las obras que se realizarán a su alrededor». Los otros tres, ubicados en la acera norte y que quedan justo en el espacio de paso creado por las líneas diagonales, «se trasplantarán a otras ubicaciones preeminentes en la ciudad».
En torno a los árboles, para salvar la diferencia de cota, se diseñarán plataformas y bancadas de madera con el fin de «generar lugares de estancia y que pueden convertirse en espacios para eventos y actividades culturales, a modo de gradas». Esa es la apuesta, por ejemplo, frente a la iglesia de San Nicolás. No en vano, «el centro de la actividad del paseo se mueve hacia esa acera norte, reactivando los frentes comerciales, maximizando el espacio de paseo y creando nuevas zonas».
En la zona sur, por su parte, se concentrarán los servicios, como las paradas de autobús urbano, los aseos autolimpiables, los recorridos ciclistas y los carriles habilitados para servicios y emergencias, además de contenedores y aparcamientos de bicicletas y plazas reservadas para carga y descarga.
El eje central se plantea como un espacio libre para poder acoger mercadillos y ferias. El proyecto prevé una ordenación de la tradicional tómbola, que «mejora la fluidez y la seguridad y evita el efecto embudo producido entre los dos módulos».
ESCULTURAS
El diseño incluye también la reformulación de los dos extremos, junto al Parlamento y el Palacio de Navarra. Es en esta última zona donde se ubicará la escultura figurativa de Pablo Sarasate. Para ello, el proyecto propone una escultura del músico pamplonés en el centro de una nueva plaza frente al Palacio de Navarra, en la entrada al paseo desde la plaza del Castillo. La escultura se ubicará en una bancada de madera, en torno a un árbol. Además, se reformularán los accesos al Monumento a los Fueros, siguiendo con la estética del resto del paseo y extendiendo con plataformas de madera la escalinata, para salvar el desnivel y aumentando el espacio de estancia en torno al monumento.
En el otro extremo del paseo, junto al Parlamento de Navarra, se realizará la otra intervención artística con la instalación de la escultura ‘Monumento al prisionero político desconocido’, de Jorge Oteiza, a modo de arco de triunfo o portal. A todo ello se suma la propuesta de incorporar una fuente de niebla, que se convertirá en un espacio lúdico con iluminación especial.
«Además de su valor simbólico, la fuente servirá como un sistema de drenaje sostenible del agua de lluvia, ya que se encuentra en el punto más bajo del paseo. Los autores tenían la oportunidad de incluir otra obra de Oteiza (‘Momento espiritual’) pero, finalmente y al igual que tres de los otros cuatro finalistas, se decantaron por colocar una sola. El quinto equipo no colocaba ninguna de las dos obras propuestas por el Ayuntamiento», indicó el Consistorio de la capital navarra.
CRITERIOS DE SELECCIÓN
El jurado ha valorado, sobre el resto de propuestas presentadas, que el proyecto Isolíneas «resuelve las dimensiones social, patrimonial y medioambiental del paseo habitando el espacio, conservando las alineaciones arboladas y planteando una topografía que permite la ampliación de zonas verdes». Según el jurado, la propuesta «resuelve correctamente el carácter de plaza accesible en todos sus recorridos, creando abundantes pasos transversales facilitando la permeabilidad en el eje norte-sur, con una direccionalidad que además se considera propia del caminar y de los recorridos propios del paseo».
Además, destaca el hecho de que la propuesta revitalice los espacios en torno al Monumento a los Fueros, la iglesia San Nicolás y el Parlamento de Navarra. Las actuaciones en torno al Monumento a los Fueros potencian, según el jurado, «su carácter de espacio representativo, al que se suman, además, la escultura de Pablo Sarasate». A todo ello se suma el juego de las esculturas de Jorge Oteiza frente al Parlamento de Navarra, junto con una fuente de niebla. Para el jurado, ese juego es «interesante y sirve para dignificar los tres nodos urbanos y arquitectónicos principales que se localizan en el Paseo de Sarasate».
OBRAS EN VERANO
La propuesta ganadora obtiene la adjudicación del contrato de redacción de proyecto definitivo y, en su caso, la dirección de obra. El Ayuntamiento de Pamplona había previsto para las obras una inversión de 10,2 millones de euros, de los que 2 millones aporta la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona para la renovación de redes. El presupuesto presentado por Isolíneas cifra en 6,97 millones la obra de renovación que, sumados los gastos generales, el beneficio industrial y el IVA dan un presupuesto total de 9,13 millones de euros. Los mayores costes corresponden al cambio de firmes y pavimentos (un 47,90 %), los equipamientos (14 %) y la jardinería (6 %).
Según explicó el responsable de Ciudad Habitable y Sostenible, Borja Izagirre, el proyecto será sometido ahora a un proceso participativo «para recabar posibles mejoras». Ese proceso comenzará el 21 de enero con su presentación pública a la ciudadanía en una sesión que tendrá lugar en el salón de actos de Civivox Condestable. A partir de ese momento, los paneles explicativos del proyecto ganador e información ampliada del mismo estarán disponibles en la web Decide Pamplona. Se abrirá un plazo de tres semanas para la recepción de posibles ideas de mejora a través de la plataforma, hasta el 15 de febrero. Con todas ellas, se realizará una evaluación técnica por parte de los especialistas del área de Proyectos cuyas conclusiones se entregarán al equipo redactor.
Entre los plazos que maneja el Consistorio, se prevé contar con el proyecto definitivo en torno a Semana Santa «para ser revisado de forma interna y elaborar los informes pertinentes». El objetivo es licitar las obras en el segundo trimestre del año, entre mayo y julio, de forma que el inicio de las mismas pueda producirse tras los Sanfermines de 2025. De cumplirse los plazos, la obra podría estar finalizada en diciembre de 2026.