Algunos expertos consideran que en la actualidad hay una oportunidad única en Navarra para el uso de la biomasa forestal como fuente de energía sostenible.
Esta es una de las conclusiones del curso de verano sobre biomasa organizado por la Universidad Pública de Navarra, el Ayuntamiento de Garde (Roncal) y la Asociación Española de Ecología Terrestre, que se desarrolló la semana pasada en la citada localidad, y que han sido dadas a conocer por el director del curso, el profesor Juan Blanco.
Según ha informado la UPNA, los expertos concluyeron que hay una oportunidad única de recuperar el uso de la biomasa forestal como una fuente de energía sostenible y esta situación se debe a una combinación de la gestión pasada de los montes, del precio de los combustibles fósiles y del desarrollo tecnológico del sector.
Las conclusiones del curso señalan que existen herramientas cualitativas y cuantitativas para valorar la sostenibilidad del uso de esta energía de forma combinada en los ámbitos ecológicos, económicos y sociales, y que el uso de la biomasa forestal como energía se está extendiendo rápidamente en el ámbito rural y de las pymes, pero queda como reto su desarrollo en ambientes urbanos e industriales.
Otros retos son garantizar la capacidad productiva del bosque, manteniendo el funcionamiento y la biodiversidad del mismo a largo plazo; asegurar que existe una demanda suficiente para mantener la producción de biomasa, y que la demanda no desborda la capacidad de producción del sector industrial y del medio ambiente; y asegurar que el uso de la biomasa se realiza de forma que se pone en valor un recurso local y se potencia la economía rural, pero sin poner en peligro otros usos del monte.
Asimismo apuntaron que la viabilidad de la biomasa como una fuente de energía sostenible depende de los condicionantes particulares de cada monte, usuario y zona.