La dirección de la multinacional Industrias Cousin Freres, ICF, joint venture de Faurecia y Lear, ha decidido cerrar en diciembre su centro de trabajo de Burlada como consecuencia de la caída de los volúmenes de producción, la no renovación de importantes proyectos y la pérdida de competitividad en el mercado europeo de producción de componentes para el automóvil.
No obstante, sus directivos se han comprometido con las autoridades locales y, fundamentalmente con SODENA, a “buscar proyectos de reindustrialización” que doten de un futuro viable a la factoría y las 85 personas que, actualmente, trabajan en ella. A tal fin, desde ICF se han puesto en contacto con la consultora internacional americana Lee Hecht Harrison, LHH, del grupo Adecco, que será la encargada de gestionar un “Plan de Industrialización” para esta parte de la Comarca de Pamplona para el que ya se han puesto en contacto con diversos representantes de la sociedad pública citada anteriormente.
En concreto, según se ha sabido en estas últimas horas. una delegación del Gobierno de Navarra mantuvo el pasado mes de mayo una reunión con representantes de ICF en Madrid, una cita a la que asistieron la directora general de Política Económica, Izaskun Goñi, personal técnico de SODENA y, Víctor Audera, director general de Industria del ministerio de Industria, que facilitó el encuentro. Fue, precisamente, en dicha reunión, donde la multinacional se comprometió a facilitar la búsqueda de proyectos para la reindustrialización.
Tras este primer encuentro, el Ejecutivo foral también ha mantenido otras citas ya con LHH, la entidad encargada de la gestión de dichos planes de industrialización. Unas reuniones en las que las máximas autoridades de la Comunidad foral han insistido en poner sobre la mesa, “con la mayor intensidad que la legalidad vigente permita, los proyectos generadores de empleo viables y sostenibles que garanticen la continuidad industrial de la planta y el mantenimiento del mayor número posible de empleos“, de acuerdo con la información remitida al respecto por fuentes conocedoras de este proceso.
FUTURO INCIERTO
Cabe recodar que la salida de ICF de Burlada estuvo siempre presente en el convenio que firmaron justo hace ahora un año la representación laboral y la dirección de la compañía. En virtud de dicha alianza, se acordó prolongar la actividad de la planta hasta el final de 2016 y facilitar salidas graduales a través de recolocaciones, prejubilaciones y bajas incentivadas. Ahora, una vez confirmada su salida,el objetivo es localizar un inversor externo que permita mantener el mayor volumen posible de empleo. Un proceso en el que SODENA realizará labores apoyo y seguimiento.
Por su parte, los antiguos propietarios destacan que las empresas en fase de expansión interesadas en ampliar o localizar su actividad en el entorno de Pamplona tienen a su disposición unas instalaciones “en perfecto estado de uso y en una ubicación privilegiada”. “Está localizada estratégicamente en el Polígono Industrial de Burlada con acceso directo a la ronda de circunvalación de Pamplona (PA-30) y a tan sólo 9 kilómetros del polígono de Landaben”, indicaron para destacar a continuación que las condiciones de cesión de activos son “competitivas” y se negociarán de forma individualizada en función del volumen y características del empleo generado.
El centro productivo de Burlada está especializado en la fabricación de componentes metálicos para el sector de la automoción. Cumple la normativa en prevención de riesgos laborales y cuenta con los certificados ISO 14001, ISO TS16949 y OHSAS 18001. La nave industrial se asienta sobre una parcela de 10.000 metros cuadrados, 7.000 de ellos de superficie construida.
Todas aquellas entidades u organizaciones interesadas pueden ponerse en contacto con SODENA o con Lee Hecht Harrison.
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