Responsables del Ministerio de Fomento han comunicado al Gobierno de Navarra que, debido a “los retrasos injustificados, los incumplimientos de plazos acordados y la ausencia de respuesta” por parte de la Administración foral se harán cargo “de forma inmediata” de la gestión integral del TAV en Navarra.
Dichos gestores lo justifican, además, porque “no se puede coartar el derecho de los navarros a disfrutar de una infraestructura esencial”.
En el comunicado en el que da cuenta de su resolución, las autoridades de Fomento recuerdan los contactos mantenidos desde mayo con sus homólogos de la Comunidad foral y, como “de forma insistente”, subrayan, el Ministerio ha pedido una respuesta “cuyo plazo máximo de entrega finalizaba antes del verano”, añaden.
El Ministerio justifica su decisión porque es una “infraestructura esencial de interés general”
A este respecto, indican que el último contacto mantenido data del pasado 12 de julio y que, tras el mismo, se estableció el 10 de septiembre como “fecha límite e inaplazable”, aseguran desde el Ministerio.
DE INTERÉS GENERAL
“Al no remitir el Gobierno de Navarra las observaciones al convenio -continúa el comunicado-, el pasado 11 de septiembre el ministro de Fomento se puso en contacto con el vicepresidente foral para reclamarle lo acordado sin que, a fecha de hoy (13 de septiembre) se haya remitido ningún documento y sin que tampoco dicha remisión se vaya a producir en estos días”.
Igualmente, desde Fomento apuntan como otro motivo para justificar su decisión unilateral las declaraciones de la portavoz del Gobierno de Navarra, María Solana, quien este mediodía ha confirmado que “no se destinará ni un solo euro para el tren de alta velocidad en las cuentas autonómicas de 2018 para los tramos entre Villafranca y Peralta y Peralta y Olite”.
Fomento mantiene su voluntad de seguir trabajando y colaborando con el Gobierno aunque anuncia para el 15 de octubre y el 15 de noviembre la entrega de los proyectos técnicos para iniciar ya la licitación de obras
En este caso, el Estado argumenta que “existe un compromiso de licitación para estas dos actuaciones en el 2017 lo que inevitablemente -bajo su punto de vista- implicaría disponer de recursos para su ejecución en parte del año 2018″.
Por tanto, concluyen, “llegados a este punto y tras casi cuatro meses de espera, el Gobierno está obligado a tomar una decisión en la línea de lo anunciado ya en numerosas ocasiones“. “Estamos -continúan- ante una obra de interés general, imprescindible para los navarros, que mejorará la competitividad y la conectividad de la región” por lo que se quiere evitar más retrasos.
MANO TENDIDA
No obstante, la nota del Ministerio de Fomento también matiza el interés del Estado por “mantener un contacto permanente, como siempre hace, desde la lealtad institucional y la colaboración entre las distintas administraciones” que lo componen.
Ello, sin embargo, no será óbice para, tal y como se anuncia, los próximos 15 de octubre y 15 de noviembre, la empresa adjudicataria entregará los proyectos Villafranca-Peralta y Peralta-Olite a las autoridades forales, tal y como se había acordado en las reuniones técnicas previas.
“A partir de este momento, el Ministerio comienza los preparativos para la correspondiente tramitación administrativa que lleve a la aprobación previa a la licitación de las obras antes de que concluya 2017. ADIF ya está trabajando en las expropiaciones necesarias“, concluyen desde el Gobierno de España.