“Emprendimiento Universidad de Navarra” acaba de dar su primer fruto empresarial, ‘Innoprick’, desde su puesta en funcionamiento el curso pasado. Un logro en el que ha desempeñado un papel fundamental la colaboración prestada desde un fondo de capital riesgo dotado con 9 millones de euros.
Tal y como explica su promotor, el doctor Gastaminza, el proyecto se le ocurrió al comprobar el tiempo que se invierte en recoger los datos de pruebas alérgicas. “Siempre he pensado que no sacábamos todo el potencial diagnóstico que tienen, en contraste con la sofisticación tecnológica en muchos campos de la Medicina”, indicó.
Por su parte, otro de sus responsables, Gustavo Pego, consideró que su proyecto es fruto porque “somos un Centro Universitario investigador, con equipos y servicios de apoyo de gran nivel, alineados por un objetivo común”. Dicho propósito fianl, a su vez, lo explicó el rector Alfonso Sánchez Tabernero: “crear en torno a la Universidad empresas innovadoras, así como empleo de calidad”.
Ahora, al frente de la iniciativa se encuentra Óscar Matellanes, un emprendedor con amplia experiencia que ha realizado el plan de negocio.
APUESTA GLOBAL
Durante 2015, por ejemplo, se realizaron manualmente en Navarra 18.000 pruebas cutáneas de alergología. Esto consiste en aplicar diferentes alérgenos sobre la piel y, uno a uno, se registra sobre papel milimetrado el tamaño de la erupción que provocan en el paciente
Innoprick automatiza la parte más importante de la prueba y mide con exactitud los resultados del test. Asimismo recoge toda la información de una sola vez y permite almacenarla en formato digital; facilitando el estudio estadístico que hasta ahora no se podía llevar a cabo.
El dispositivo, en fase de optimización, está siendo probado a nivel clínico y algunos alergólogos ajenos a la Clínica Universidad de Navarra ya se muestran interesados por su lanzamiento comercial, previsto dentro de dos años. A este respecto, Matellanes sostuvo que la iniciativa “cuenta con grandes profesionales, un sector en crecimiento y una tecnología desarrollada desde la demanda de mercado”.
La Universidad de Navarra inaugura así una de sus apuestas globales y otorga carácter empresarial al trabajo de su personal investigador. “Es importante que nos sintamos orgullosos no solo de nuestra labor; sino de que haya personas en el campus con buenas ideas de mejora y que la Universidad las impulse”, destacó David Luquin, de “Emprendimiento”.
Pego y Luquin resaltaron la investigación como factor clave para gestar nuevos proyectos, que deben tener como característica fundamental la innovación; ya sea en los procesos, en el modelo de negocio, en la aplicación del conocimiento o en cualquier otro aspecto. Animaron a los profesionales con ideas a contactar con ellos, para trabajar juntos e intentar convertirlas en una realidad.
Los responsables de “Emprendimiento Universidad de Navarra” adelantaron que actualmente hay más proyectos en marcha, con distintos grados de desarrollo, y que al menos uno verá la luz en 2017