En 2015 han entrado en vigor algunas novedades fiscales a través de la Ley foral 29/2014, de 24 de diciembre, de Reforma de la normativa fiscal y de medidas de incentivación de la actividad económica.
Para que las empresas puedan aprovechar las ventajas fiscales por actividades y acciones innovadoras desarrolladas deben analizar cuanto antes sus oportunidades. Desde ZABALA Innovation Consulting hemos comprobado, a lo largo de nuestros casi 30 años de experiencia, que la competitividad va ligada a la capacidad de innovar y a una adecuada gestión de ese proceso. Tan importante es lo uno como lo otro; no se pueden desperdiciar oportunidades ni ventajas por el camino, tampoco a nivel fiscal.
¿Cuáles son las ventajas fiscales que pueden obtener las empresas en este nuevo escenario fiscal, desarrollando actividades innovadoras?
En un primer golpe de vista, se mantienen las deducciones por I+D+i contempladas en años anteriores (40% I+D y 15% innovación), así como las adicionales previstas por personal exclusivo y por subcontrataciones con centros tecnológicos y universidades.
Con este mantenimiento, al eliminarse otras que describiremos más adelante, la reforma da una mayor importancia a las deducciones fiscales por actividades de I+D+i, y conlleva algunos cambios de interés enel Impuesto de Sociedades.
PATENT BOX Y TIPOS NOMINALES
Entre los cambios favorables para la innovación que se incluyen en el Impuesto de Sociedades destaca el incentivo llamado Patent Box, que reduce de la base imponible un porcentaje de los ingresos por cesión de patentes y diseños industriales, entre otros.
El sistema actual de Patent Box -el tercero en menos de tres años, esperemos que sea el definitivo- reduce de la base imponible hasta el 60% de los ingresos de la cesión cuando la empresa es la desarrolladora del conocimiento. Si la propiedad intelectual la ha desarrollado otra entidad, pero figura como titular la empresa cedente (el sujeto pasivo del Impuesto de Sociedades), evitará aportar el 30% de los ingresos de la cesión, sin límite de cuantía ni límite de volumen de ingresos en todos los casos.
También en lo referente al Impuesto de Sociedades destaca la rebaja del tipo nominal para las grandes empresas que desciende del 30% al 25%. En el caso de las medianas y pequeñas empresas la reducción es menor, alcanzado el 23% y el 19% respectivamente. Además, se fija un suelo mínimo efectivo del 10%, que puede llegar a ser del 7% en caso de que la empresa cree empleo. Están excluidas de esa tributación mínima las deducciones de I+D+i, las de inversiones, doble imposición interna e internacional y bonificaciones, lo que las hace especialmente atractivas.
Con el nuevo marco normativo las empresas podrán beneficiarse también de la ampliación del plazo de aplicación de las deducciones en la empresa (hasta 15 años), y el aumento de la cantidad máxima a devolver de 25.000 a 100.000 euros en supuestos de insuficiencia de cuota para las pequeñas empresas.
LA ESTRATEGIA DE INNOVACIÓN
Pese a que la situación de Navarra es mejor que la media del país, todavía estamos lejos del 3% del PIB que la Comisión Europea marcó como objetivo del gasto en I+D+i para el año 2020. Tras rozar durante años el 2%, se ha retrocedido al 1,24% en España, y al 1,79% en Navarra. Esta situación debería hacer reflexionar y replantear estrategias a instituciones, empresas y centros de investigación.
Desde 2001, el apoyo fiscal a la innovación en Navarra se ha traducido en un soporte necesario para el sistema de I+D+i con variaciones y mejoras paulatinas, lo que da robustez, fiabilidad y conocimiento a las empresas. Si bien, respecto a la Patent Box, el haber experimentado tres sistemas en tres años hace que las empresas lleguen a dudar de un sistema que en realidad es muy beneficioso para sus intereses.
Tal y cómo se ha expuesto anteriormente la reforma fiscal abre posibilidades y ofrece ventajas a las empresas. Conviene apresurarse y buscar asesoramiento para ser más eficientes y ahorrar recursos. Fiscalmente hay apoyo, la cuestión está en conocer cómo optimizar las oportunidades.
José Mª Zabala
Director General de Zabala Innovation Consulting