La Asociación de Inspectores de Hacienda Foral de Navarra, en la que participa más del 90 % del colectivo, convocó este jueves dos jornadas de huelga: una para el próximo 4 de febrero y otra a partir del 11 de febrero «con carácter indefinido». Según informó la entidad, la protesta tiene como objetivo principal «poner fin a la situación de desigualdad salarial existente (que alcanza el 30 %) respecto a sus homólogos de las administraciones tributarias del Estado y del País Vasco«.
Estos profesionales son funcionarios de carrera encuadrados en el nivel A, altos funcionarios de la Hacienda Foral, que acceden a sus puestos de trabajo mediante unas oposiciones «consideradas de las más exigentes» de la función pública. «En los últimos meses, se ha tratado con los departamentos de Economía y Hacienda y de Función Pública la situación de este colectivo: el aumento de la complejidad del trabajo; el incremento del número de tributos a gestionar; el preocupante descenso del número de aspirantes a la oposición; y, sobre todo, las grandes diferencias salariales con otras administraciones tributarias, que suponen una vulneración de los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad», explicaron desde la asociación.
Ante la falta de respuesta a las demandas «en relación con este último motivo», desde la organización decidieron convocar esta huelga, «como muestra de su unidad y determinación» y con el fin de «restablecer el diálogo» con las autoridades competentes «para encontrar una solución que satisfaga sus demandas y permita restablecer la normalidad» en el servicio.
«La situación de abandono denunciada por el colectivo debe ser abordada en aras de lograr la máxima eficiencia y competitividad de nuestra Hacienda Foral, pilar fundamental de nuestro régimen y autogobierno. En caso contrario, nos tendremos que conformar con una Administración tributaria de segundo nivel y desvirtuada de su papel original», concluyeron desde la asociación.