Crear proyectos para cubrir necesidades. Esa es una de las principales premisas de los emprendedores e investigadores de I+D+i. Con esa idea, precisamente, surgía LQTAI (Life Quality Technology Accessibility and Innovation), en 2011. Su principal objetivo es la transferencia a la Sociedad de la Investigación, Innovación y de los avances científicos y tecnológicos que han desarrollado y siguen desarrollando, para contribuir a la mejora de la calidad de vida de la ciudadanía. De esta forma, intentan dar respuesta a las necesidades específicas de las personas en sus procesos de envejecimiento y de mantenimiento, desarrollo o recuperación de la autonomía personal.
Entre estas tecnologías para la mejora de la Calidad de Vida, LQTAI ha desarrollado apps, redes de sensores y plataformas informáticas, entre otras, que permiten al profesional sanitario realizar un seguimiento en tiempo real del paciente, desde la distancia. Además, participa en varios proyectos de I+D+i nacionales y europeos, relacionados con el alzheimer o la vida independiente asistida, entre otros. Gracias a esa labor, LQTAI ha sido una de las 6 finalistas del Premio Emprendedor XXI.
ELECTROCARDIOGRAMA
El mundo del deporte ha llorado muchas pérdidas por fallos del corazón, como el caso del joven jugador del Sevilla, Antonio Puerta. Su difusión sirvió para que los clubs implantaran mayores controles sanitarios a sus jugadores. En el control está la posibilidad de diagnosticar y anticiparse a los problemas.
Conscientes de ello, LQTAI ha desarrollado un dispositivo basado en un electrocardiograma, que es la representación de la actividad eléctrica del corazón. La novedad de este producto está en la recogida de datos, de forma constante, y el envío directo de esa información al centro hospitalario. Para ello, se utiliza el sistema bluetooth del móvil, que transmite información por radiofrecuencia, aprovechando que “el teléfono es de uso personal y lo llevamos cerca”.
Es un “seguimiento en tiempo real del paciente, que permite a los profesionales médicos diagnosticar al paciente”, explica Miguel Martínez de Espronceda, ingeniero de telecomunicaciones de LQTAI. Se puede, además, “programar el seguimiento de forma indefinida, hasta que el médico considere que el paciente está correctamente diagnosticado”.
INVESTIGACIONES
La idea surgió de una de las tesis que estaban llevando a cabo los ingenieros de esta empresa que surgió como Empresa Innovadora de Base Tecnológica (EIBT) de la Universidad Pública de Navarra y cuenta con el apoyo del profesorado. Una línea de investigación que, en sus inicios, logró el Premio Fundación Vodafone.
De una tesis también comenzó el desarrollo de otra de las líneas de investigación, que pretendía poder comunicar los dispositivos en un lenguaje universal. En la actualidad, el problema del sector sanitario es que habla muchos lenguajes, desde el inglés, hasta el chino. “No se entienden entre ellos, de tal forma que los datos y el conocimiento se pierde, creando islas de información”.
Los productos desarrollados se encuentran en la fase comercial, para implementar estos productos en farmacias, residencias, hospitales o centros de días, entre otras. LQTAI, no obstante, tienen en desarrollo otros dispositivos para el sistema de control personal.
RETOS
El reto de futuro de LQTAI es seguir creciendo, manteniendo el vínculo con la UPNA, porque “hay muchos proyectos e ideas buenas, pero no llegan al mercado”, explica Santiago Led, otro de los ingenieros de telecomunicaciones de la empresa. Esa ausencia a la hora de llevar ideas buenas al mercado es, precisamente, lo que sufrieron ellos al empezar y lo que les motivó a crear LQTAI.