El consumo energético de Navarra durante el pasado año descendió ligeramente respecto a 2015, de acuerdo con el Balance Energético de Navarra 2016 presentado en el último encuentro del ciclo “Viernes de Desarrollo Económico” que tuvo lugar en el Palacio del Condestable de Pamplona.
Según dicho resumen, la Comunidad foral destinó en 2016 un total de 1.642 millones de euros o, lo que es lo mismo un 8,46% de su PIB a consumo energético, lo que representa un 0,6% menos con respecto a 2015. Cabe recordar a este respecto que, en 2012, dicha “factura” llegó a suponer el 11,56% del PIB lo que supuso la cota más alta del periodo 2009-2016.
Al margen de estas cifras, la jornada también sirvió para conocer las acciones emprendidas desde la Dirección General de Medio Ambiente y Agua para cumplir con la Hoja de ruta del Cambio Climático aprobada por el Ejecutivo autonómico .
REPERCUSIÓN ECONÓMICA
Del Balance Energético de Navarra 2016 se pueden extraer algunas conclusiones llamativas. Así, por ejemplo, se pueden mencionar las siguientes:
- La mayoría de la energía consumida procede de fuera de nuestro territorio ya que el autoabastecimiento apenas representa el 16,3% del total.
- En agricultura y, sobre todo, en industria, el coste es más barato por su relación con el volumen total consumido. Justo al contrario de los denominados “sectores difusos” (transporte, la Administración o los servicios) donde es más caro.
- Vinculada con ésta última: es más rentable invertir en eficiencia energética en dichos “sectores difusos” porque su ganancia en competitividad sería mayor.
MENOS PETRÓLEO, MÁS GAS
Otras conclusiones que también se pudieron conocer en esta última sesión de los ‘Viernes de Desarrollo Económico” fueron que:
El petróleo y sus derivados suponen casi la mitad de toda la energía final empleada en Navarra, con un 42,8% del total. No obstante se aprecia un descenso de casi un 6% respecto al consumo de 2015 por factores como la renovación del parque móvil (menos consumo de gasóleo A) o la extensión del gas natural como alternativa al gasóleo C para la calefacción en invierno.
Por su parte, el gas natural y la electricidad –los otros dos tipos más utilizados- aumentaron su consumo en 10,43 y un 1,42 por ciento, respectivamente.
La dependencia energética externa sigue siendo difícil de evitar ya que el petróleo y el gas natural suman el 67,65% de la energía que consume la Comunidad Foral.
El tercer tipo de energía más utilizado, la eléctrica, supone el 21,48% del total, con el ligero repunte señalado anteriormente respecto a 2015.
El estudio también concluye que solo dos sectores (administración y servicios públicos) han protagonizado un ligero descenso en su consumo energético (del 0,04 y del 6,19 por ciento respectivamente).
Mientras, agricultura, doméstico y servicios e industria aumentar su consumo un 8,58; un 4,53 y un 1,3 por ciento, cada uno.
A continuación, para todos los interesados, ponemos a su disposición una copia del Balance Energético de Navarra 2016 presentado en el último “Viernes de Desarrollo Económico” promovido por el Ejecutivo foral.
