Responsables y Técnicos de la Fundación Miguel Servet, entidad encargada de la dirección de Navarrabiomed, acogieron la reciente visita de pacientes, familiares y voluntarios de la Asociación de Esclerosis Lateral Amiotrófica de Navarra, ADELA Navarra, quienes conocieron, de este modo, el proyecto investigador puesto en marcha en la citada institución contra la ELA a partir de los fondos recaudados el pasado año.
En la actualidad, Navarrabiomed ha destinado el dinero obtenido gracias a la campaña Ice Bucket Challenge (que tanto éxito cosechó el pasado verano) a ayudar en su trabajo al grupo de investigación de “Enfermedades neuromusculares” liderado por la doctora Ivonne Jericó Pascual, neuróloga del Centro Hospitalario de Navarra, CHN. Igualmente, este centro investigador informó que cuenta con la participación de siete profesionales más del Servicio Navarro de Salud de diferentes especialidades complementarias (Neurología, Neurofisiología, Neuropatología, Genética y Radiología).
Junto a ellos, el equipo de la Dra. Jericó trabaja en colaboración con las plataformas tecnológicas de Proteómica y Biobanco, cuyas instalaciones también pudieron conocer los miembros de ADELA Navarra. En dicha visita, los invitados a Navarrabiomed conocieron que los fondos que recaudaron serán utilizados en un proyecto colaborativo que utiliza la proteómica como pilar central. El estudio se centra en la identificación de potenciales biomarcadores diagnósticos de ELA y tratará de contribuir a un mejor conocimiento de la fisiopatogenia de esta enfermedad.
Además, el encuentro sirvió para que los investigadores tuvieran la oportunidad de compartir los objetivos, metodología y plan de trabajo con los miembros de la asociación.
SOBRE LA ELA
La Esclerosis Lateral Amiotrófica, ELA, es una enfermedad degenerativa del sistema nervioso central que afecta fundamentalmente a las neuronas motoras y que cursa con debilidad y atrofia progresiva. Se estima que cada año se diagnostican 1-2 casos nuevos por cada 100.000 habitantes.
En cuanto a las causas de esta enfermedad, todavía no se conoce con exactitud su origen y por ello es fundamental apoyar el desarrollo de la investigación en este campo. Es imprescindible avanzar en el conocimiento de la enfermedad para contribuir al desarrollo de tratamientos eficaces.
La supervivencia media de los afectados es variable y aunque en la actualidad no existe tratamiento curativo, los avances en el tratamiento sintomático y paliativo han contribuido a mejorar la calidad de vida de los pacientes en los últimos años.
