La Comisión de Presidencia del Ayuntamiento de Pamplona aprobó, en su sesión de este martes, una declaración presentada por Navarra Suma para solicitar al Gobierno central que flexibilice la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, que data de 2012. El texto contó con el «apoyo unánime» de los grupos.
Según esta ley, informó el Consistorio, las entidades locales deben dedicar el 80 % de su superávit a reducir su deuda, y el 20 % restante a inversiones financieramente sostenibles. Ante la situación actual, el Ejecutivo central ha permitido mediante Real Decreto destinar ese 20 % a gastos en servicios sociales y promoción social, así como a prestaciones relacionadas con la crisis sanitaria coronavirus. Sin embargo, salvo esta excepción, «la normativa básica sigue obligando a la administración local a aplicar sus superávits a la reducción de deuda», critica el Ayuntamiento de la capital navarra.
A través de esta declaración, el Consistorio acordó instar al Gobierno de España a flexibilizar la Ley 2/2012, de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, de forma que “se permita a las entidades locales destinar el superávit a aquellas necesidades extraordinarias que ha producido la crisis sanitaria originada por el Covid-19”. Y, por otro lado, solicita que “se revisen los límites establecidos por la regla de gasto y de estabilidad presupuestaria, adaptándose a la nueva realidad social y económica».
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