La dirección de Reciclauto Navarra S.L. informó de que ha procedido “con total éxito” a la extracción del agua de los restos del submarino militar español MARSOPA para culminar su proceso de de desmontaje final en tierra. De este modo, los técnicos afrontan la parte definitiva de una tarea que iniciaron a finales del pasado año y que esperan terminar en los próximos días en el puerto de Vinaròs, en Castellón.
En concreto, su objetivo será la completa eliminación de lo que queda del submarino MARSOPA y que corresponde con lo que se conoce como su “zapatilla”. Se trata de una pieza de acero de alta resistencia, de más de 200 toneladas de peso, y cuya forma, ovalada y alargada al mismo tiempo, complicaba excesivamente los trabajos de corte sobre el agua. Por todas estas razones que acabamos de mencionar, en Reciclauto Navarra decidieron el traslado de estos restos de la nave a tierra firme en una operación que ellos mismos calificaron como “muy compleja” y para la que, además, “hemos tenido que aplicar unos conocimientos altos de ingeniería en colaboración con nuestro proveedor Grúas Rigar”, añadieron.
La extracción se planificó y desarrolló, además, en dos fases debido a que el puerto de Vinaròs carece de una rampa que, según indicaron los expertos de Reciclauto, “hubiera facilitado mucho la sujeción y posterior subida del submarino a la superficie en un único movimiento”. Como esto no era posible, la primera decisión que se tomó fue la de reducir al máximo el peso de lo que quedaba del MARSOPA en el agua. De este modo se consiguió aligerar la nave, y adecuarla a la capacidad de maniobra de las dos grúas de 500 Toneladas que se contrataron ad hoc y que, ya en una segunda etapa, se encargaron de la sujeción y el desplazamiento de la pieza fuera del agua.
En cuanto a lo que queda por hacer, en Reciclauto Navarra confirmaron que mantendrán los mismos criterios que hasta ahora han aplicado en sostenibilidad, vigilancia de la salud y respeto al medio ambiente y que corresponden con los mínimos exigidos por las autoridades europeas.
Por lo que respecta al futuro más inmediato, desde esta misma organización se mostraron especialmente optimistas porque el trabajo que han realizado les ha confirmado en su idea original de que “existe una necesidad en nuestro país de contar con industria especializada en el tratamiento y descontaminación sostenible de buques de acero al final de su ciclo de vida”.
UN PROYECTO BENEFICIOSO PARA VINARÓS
Igualmente, se mostraron especialmente satisfechos porque “la experiencia que hemos adquirido con el reciclaje del MARSOPA nos permitirá afrontar trabajos más ambiciosos y en un plazo de ejecución mucho más corto”. Para esos próximos retos, la dirección de Reciclauto Navarra confía en mantener el magnífico equipo humano que ha formado durante estos meses. “El 70%, además, son vecinos de la propia Vinaròs y alrededores, así como un 80% de los proveedores de servicios, por lo que estamos encantados de haber aportado este beneficio extra a la comunidad”, aseguraron.
En ese mismo sentido, estos gestores recordaron que, recientemente, entregaron a Salvamento Marítimo, SASEMAR de Cartagena, un segundo equipo de válvulas de ventilación del submarino Marsopa, a imagen y semejanza del que entregaron el febrero pasado y que, como aquel primer equipo, estarán destinadas a mejorar los sistemas de seguridad y rescate en alta mar de los equipos de Salvamento Marítimo.
Sus promotores recuerdan, por último, que la extensión de este tipo de nueva industria medioambientalmente responsable traerá una serie de importantes beneficios para el conjunto de la sociedad. De todos ellos, el fundamental sería la creación de nuevos empleos en poblaciones y áreas de costa que arrastran graves problemas de desindustrialización, paro y exclusión social desde los procesos de reconversión industrial que sufrieron en las últimas décadas del siglo pasado.
Igualmente, estos gestores subrayan que su proyecto podría ser una alternativa viable e inmediata a la crisis que atraviesan los astilleros españoles, por lo que confían en que las Autoridades debieran facilitar y fomentar la implantación de esta actividad.
