Renault consiguió hacer del Laguna un superventas. Sus cualidades ruteras, confort y la incorporación de soluciones novedosas y propias de vehículos de superior categoría merecieron el reconocimiento de la crítica y una acogida entusiasta por parte de los usuarios. Consciente del reto que supone la sustitución de un modelo de éxito, la marca del rombo ha realizado un coche que da un salto tremendo con respecto a su predecesor, porque el Talismán es más grande, ofrece aún mejores acabados y dispone de todo tipo de avances tecnológicos y ayudas a la conducción que lo convierten en un coche capaz de tutearse con los que teóricamente están uno o dos escalones por encima.
Para empezar, comparte la plataforma de un familiar, el Espace, lo que lleva sus medidas a los 4,85 m de longitud y 1,87 de anchura. Eso se traduce en un interior espacioso y un maletero enorme, y gracias a la separación de las ruedas su estabilidad es sobresaliente. Se ofrece con cambio manual o automático de doble embrague, y entre su equipamiento destaca la completa relación de asistentes a la conducción. Pero sobre todo llama la atención la disponibilidad del sistema de cuatro ruedas directrices 4control, que garantiza la mejor tracción en cualquier circunstancia y posibilita una insospechada maniobrabilidad urbana al reducir en muchos grados el radio de giro.
Otro de los atractivos del Renault Talismán es su diseño, obra de Laurens van den Acker. Moderno y llamativo, sin dejar de ser elegante, puede satisfacer los gustos de cualquier tipo de usuarios aunque está clara su vocación de coche familiar. En el frontal dominan los faros full LED, que se prolongan hacia los laterales y marcan la línea de una carrocería que transmite sensaciones de poder y seducción. Por detrás, un portón muy bien resuelto da acceso a un maletero de 608 litros, uno de los mayores de su categoría, enmarcado por luces LED que dan visibilidad al modelo.
Las cuatro ruedas direccionales del Talismán garantizan la mejor estabilidad en cualquier circunstancia y un reducido radio de giro
Quizás es el interior donde más se aprecia el esfuerzo realizado por los diseñadores de Renault para que los fieles a la marca no añoren el Laguna. No solo es muy acogedor, con asientos amplios, cómodos, con todo tipo de reglajes para hacer que no se sienta la fatiga en los viajes largos, sino que han utilizado materiales de una calidad imposible de encontrar en otros vehículos de su segmento, denotan que la marca ha utilizado su alianza con Mercedes-Benz. Al reconocido diseño propio de la fábrica de Boulogne-Billancourt se ha sumado la supervisión de los procesos de calidad por los ingenieros germanos; el resultado es un habitáculo perfectamente insonorizado en el que todo está pensado para el confort y nada ha sido descuidado, sus elementos están bien integrados y la ergonomía es un modelo a seguir.
La gran pantalla (8,7 pulgadas) del sistema multimedia R-Link 2 dispuesta verticalmente en el salpicadero domina el completo cuadro de instrumentos pero no es la única disponible, hay otra más pequeña (7 pulgadas, colocada en horizontal) y una de 4,2 pulgadas (para un sistema de radio sin navegador ni otras funciones). Es la evidencia de que el Talismán incorpora la más moderna tecnología electrónica aplicada al automóvil, que también se percibe en asistentes como el programador de velocidad activo, frenado de emergencia, aviso de vehículos en el ángulo muerto de los retrovisores, advertencia por cambio involuntario del carril, asistente de aparcamiento, cámara trasera o un pionero sistema de proyección de información sobre una lámina de plástico que nos da cuenta de la velocidad, la lectura de las señales del sistema de reconocimiento de señales y las indicaciones del sistema de navegación GPS. Es un sistema sencillo, que cumple su función con gran eficacia.
¿Más atractivos? Por ejemplo, la función Multi-Sense, que permite variar el funcionamiento de la dirección, el motor, la caja de cambios (automática), la amortiguación, así como las diferentes opciones de información que se muestran en el cuadro de instrumentos, la iluminación ambiental ¡e incluso el sonido del motor!