Los servicios de banda ancha se definen genéricamente como servicios de comunicaciones electrónicas a alta velocidad que permiten al usuario, utilizando un terminal específico (ordenador, móvil, televisor, etc.) disponer de una conexión de datos permanente y de capacidad de transmisión elevada. De acuerdo a la velocidad de acceso, hablamos de banda ancha básica de 2 Mbps o superior, banda ancha rápida de 30 Mbps o superior y banda ancha ultrarrápida cuando está por encima de los 100 Mbps.
Europa incluyó en la Agenda Digital Europea (una de las iniciativas de la Estrategia Europa 2020) el despliegue de banda ancha para fomentar la inclusión social y la competitividad en la UE. Inicialmente se estableció el objetivo de llevar la banda ancha básica (2 Mbps) para todos los europeos en 2013, objetivo ya cumplido, y posteriormente se tiene por objeto garantizar que, para 2020, todos los europeos tengan accesos de alta velocidad a Internet, de más de 30 Mbps y el 50% o más de los hogares europeos estén abonados a conexiones de Internet ultrarrápidas por encima de 100 Mbps.
Navarra perdió tiempo a la espera de que invirtieran las operadoras, que no lo hicieron por falta de rentabilidad
En Navarra, después de unos años en los que se trabajó adecuadamente para que la Comunidad no quedara rezagada tecnológicamente en materia de telecomunicaciones, no se actuó con la misma diligencia cuando se inició y generalizó la evolución de las nuevas redes. Con más de un 99% de cobertura, cuenta con banda ancha básica y la Ribera del Ebro y la Comarca de Pamplona pueden considerarse bien cubiertas en lo que a la banda ancha se refiere, pero el resto del mapa de las redes de nueva generación es una mancha blanca porque durante los últimos años no se ha hecho gran cosa desde la Administración foral a la espera de que el sector privado tomara la iniciativa e hiciera sus inversiones.
El problema es que Navarra tiene una densidad de población baja, y eso hace que no sea interesante para las operadoras de telecomunicaciones que trabajan en un mercado, el de la prestación de servicios de internet, que está liberalizado y en manos de agentes privados que como tales buscan una rentabilidad para sus inversiones que no alcanzarían en nuestra Comunidad.
“A día de hoy tenemos 762 entidades singulares de población por debajo de los 200 habitantes, y 90 más por debajo de los 1.000 habitantes” explica Iñaki Pinillos, director gerente de la empresa pública Navarra de Servicios y Tecnologías (Nasertic), quien añade que los operadores sostienen que es por encima de 3.000 habitantes cuando los proyectos tienen rentabilidad, “pero además hay que tener en cuenta que trabajan en toda España, y como empresas privadas acudirán primero donde más rentable les resulte el negocio, habría que esperar a que terminaran en un barrio de 7.000 habitantes de Carabanchel para que viniesen a nuestro pueblo de 3.000 vecinos, íbamos a estar en la cola de las inversiones de los operadores por rentabilidad y eso iba a traducirse en una pérdida de competitividad de Navarra”.
EL PLAN DIRECTOR
Para solucionar el problema el Gobierno elaboró el Plan Director de Banda Ancha, con el que pretende “hacer proyectos rentables para los operadores, si hay rentabilidad y una competencia efectiva de empresas del sector, va a haber inversión por parte de los operadores privados y ellos mismos se van a encargar de prestar los servicios”, según Pinillos, quien precisa que Nasertic trabajó en su concepción “de manera muy estrecha con la Dirección General de Informática, Telecomunicaciones e Innovación Pública”. Existiría la opción de subvencionar a las empresas o conceder ayudas directas, pero se descartó por ser “menos sostenible” y porque, probablemente, no lograría llevar el servicio hasta los lugares con menor rentabilidad.
La visión del Gobierno de Navarra es alcanzar 100% de cobertura lo más rápido posible: que nadie quede atrás. Para llegar hasta allí, sobre todo en las zonas donde son menos propensos a invertir los operadores comerciales, aboga por un planteamiento de asociación que reúna a los sectores público y privado y a las propias comunidades con el fin de planificar a nivel local los accesos de nueva generación. Eso ayudaría, por ejemplo, a dar cobertura a las industrias, otro sector que no es interesante para las empresas “porque la densidad de usuarios en los polígonos industriales es menor y además no contratan otros servicios que ofertan las operadoras, como la televisión”.
Iñaki Pinillos: «Ya se concretan los primeros proyectos y creemos que todo irá bastante rápido»
Al final, lo que se busca es conectividad a banda ancha para los hogares, empresas, las sedes del Gobierno y otras administraciones públicas, “y además de todo eso vimos que podía servir para vertebrar el territorio, porque ayudaría a algo tan necesario como que la gente siga viviendo en los pueblos, en su tierra”, indica Iñaki Pinillos.
¿En qué fase nos encontramos? El responsable de Nasertic dice que “nos hemos dedicado a construir los cimientos de un gran edificio, eso apenas se ve, pero cuando la estructura se va levantando todo va mucho más rápido y crece en conjunto. Estamos en esa fase, ya estamos viendo concreción por parte de los operadores, están respondiendo”. En este sentido aclara que “todo lo que hemos ido haciendo estaba consensuado con unos 20 operadores de diferente tipología y nos hemos asegurado de que íbamos a tener respuesta por su parte, hubiese sido poco inteligente no hacerlo porque son ellos las que van a prestar el servicio. El proceso ha sido muy participativo, también hemos contado con las entidades locales, que se han implicado de una manera encomiable, es un problema de todos que hay que resolver entre todos”.
Iñaki Pinillos afirma que “ya se van concretando los primeros proyectos y creemos que todo va a ir bastante rápido. Si hubiéramos enfocado una zona para hacer allí una actuación contundente hubiese sido muy rápido, pero el resto se quedarían sin nada. Hemos optado por un proceso más gradual pero más importante en los resultados”. Y al ser preguntado si Navarra va a cumplir el calendario que establece la Agenda Digital Europea, es decir, que cuente para 2020 con acceso de alta velocidad a Internet de más de 30 Mbps y al menos el 50% dispongan de conexiones ultrarrápidas por encima de 100 Mbps, responde sonriente que “sí, vamos a llegar al calendario del 2020”.
