Responsables de Toyota España presentaron la gama 2018 del Toyota GT86, su deportivo compacto y ligero, de bajo centro de gravedad, motor delantero y tracción trasera que a principios de este año fue actualizado con numerosas novedades, desde una imagen exterior renovada hasta un mayor equipamiento, pasando por ajustes en el chasis o un interior nuevo.
El “nuevo” GT86 añade a todo lo anterior un sistema de frenos firmado por el especialista Brembo, “que mejora su ya de por sí excelente respuesta e incrementa el placer de conducción y las más intensas sensaciones al volante“, aseguraron sus fabricantes.
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Se trata, además, de un complemento de serie en todas las versiones y que va asociado a unas nuevas llantas de aleación, de 17’’, con neumáticos de medidas 215/45 R17. Además, este cupé cuenta ahora con un nuevo diseño para el mando a distancia, más moderno y de líneas más redondeadas.
Los acabados y los materiales del habitáculo aumentan la calidad, comodidad y satisfacción del usuario.
Cabe recordar que cuando la marca nipona se embarcó en este proyecto su idea original era la de diseñar un vehículo “sencillo e intenso, que encarnase el más puro placer de conducción pero que, por encima de todo, fuese apasionante”, explicaron sus responsables.
Pues bien, ahora en Toyota han decidido ir “un paso más allá” en cuanto a deportividad y sensaciones al volante gracias su nuevo sistema de frenos. Éste será el complemento perfecto para el motor bóxer de 147 kW / 200 CV con el que está dotado el vehículo y con su caja de cambios manual o transmisión automática, en ambos casos de seis velocidades.
ACTUALIZACIÓN
En todo caso, este nuevo GT86 mantiene las líneas maestras del modelo original, lanzado en 2012 y que, de un tiempo a esta parte, ha visto reforzado su diseño, deportivo e impactante, con nuevos faros y pilotos LED, un capó más bajo y un paragolpes delantero diferente. Además, la zona posterior incluye un nuevo alerón, de mayor tamaño, fabricado en aluminio ultraligero y pintado en color negro con las alas en el mismo tono que el resto de la carrocería.
Las variaciones a nivel mecánico afectaron a la suspensión y la amortiguación para aportar una mayor estabilidad y mejorar el confort de marcha, al tiempo que diversas medidas han permitido aumentar la rigidez de la carrocería y mejorar la aerodinámica.
Desde que fue renovado a principios de 2017, GT86 incorpora el modo Track (circuito), que permite disfrutar más de las sensaciones deportivas que transmite el cupé de Toyota al rebajar al mínimo la intervención de los sistemas electrónicos —control de estabilidad y control de la tracción—. Además, la nueva pantalla de 4,2’’ del cuadro de instrumentos ofrece información de las curvas de potencia y par y las fuerzas G. También es posible acceder a un cronómetro con el que tomar tiempos en circuito.
Estamos ante “un gran deportivo, asequible, de comportamiento sobresaliente y muy divertido de conducir”, afirman sus creadores.
Su habitáculo, por otro lado, tiene nuevos acabados y materiales, de mayor calidad percibida, y un nuevo volante, de pequeño diámetro —es el de menor tamaño de toda la gama-, que aporta un mejor control de la dirección. A ello se une la renovación de mandos y botones de las puertas y el climatizador.
Por lo que se refiere a su equipamiento, es muy abundante, con elementos como el diferencial trasero LSD tipo Torsen, los pedales de aluminio, pomo y palanca de cambio en cuero, climatizador bi-zona, asientos delanteros deportivos con estructura anti latigazo cervical y capó de aluminio, entre otros.