Situado en la localidad de Igantzi o Yanci, el Mirador de Yrisarri acoge la exposición ‘Arte para vivir y para soñar’ formada por 85 obras de 6 pintores y escultores navarros y guipuzcoanos. Esta muestra inaugura además este nuevo espacio expositivo que acogerá diferentes manifestaciones artísticas y culturales.
El artista navarro y comisario de la exposición Juan Carlos Pikabea ha realizado la selección de los creadores que componen la muestra con criterios de profesionalidad y calidad, ya que todos ellos son reconocidos a nivel nacional e internacional. En palabras de Pikabea, constituyen “una importante representación del arte de nuestro entorno”. Los pintores Ana Marín, Javier Sagarzazu y Juan Carlos Pikabea, los escultores Pedro Lanz y Lesagibel, y el polifacético artista Íñigo Manterola expondrán sus obras durante un mes en los días de apertura del parque. ‘Arte para vivir y para soñar’ pretende ser una muestra dinámica y recreativa, por lo que se han programado en paralelo actuaciones musicales y visitas guiadas.
Presentación de ‘Arte para vivir y para soñar’ con los artistas y el gerente de Irrisarri Land
Organizada por el parque de aventuras IrriSarri Land, este lugar dedicado al ocio y la naturaleza completa su programación con la cultura. Con la transformación del Mirador de Yrisarri en espacio para exposiciones, pretende impulsar la actividad creativa de artistas relevantes y al mismo tiempo estimular el enriquecimiento cultural de los visitantes. Pikabea destaca que “el arte no solo está encerrado en los museos sino en las manos de los artistas. Y con esta iniciativa privada de mecenazgo de IrriSarri Land podemos disfrutar de las obras plasmadas por artistas que dedican su vida al arte”.
Vistas del parque aventura Irrisarri Land
Como explica Joxe Elgorriaga, gerente de IrriSarri Land, “desde su inauguración, el parque siempre ha intentado desarrollar actividades lúdicas y culturales que revitalicen la oferta de ocio de la zona”. Y añade: “hasta la inauguración el año pasado del Mirador de Yrisarri, no contábamos con un espacio adecuado que nos permitiera abordar proyectos tan ambiciosos como este. Por ello estamos muy contentos de albergar esta muestra que podrá ser disfrutada por todos nuestros visitantes”.
3 SALAS, 6 ARTISTAS
La exposición se desarrolla en el Mirador de Yrisarri, edificio que cuenta con una cristalera de 30 metros y vistas espectaculares. Distribuida en 3 salas, la primera está protagonizada por los cuadros de Ana Marín y la forja del escultor de Lesaka Pedro Lanz. Marín, de padre baztanés y madre donostiarra, nace en Elizondo. Inicia sus estudios de pintura con el pintor Fidalgo y 1952 se traslada a Madrid a estudiar en el Círculo de Bellas Artes. En 1956 realiza su primera exposición individual y desde entonces ha cosechado una excelente acogida, destacando entre otras, la exposición realizada en Burdeos en la sala capitular del Convento de los Jacobinos. Esta creadora proyecta su sensibilidad de artista en y para el pueblo que le vio nacer.
La vida de Lanz está ligada al hierro, material al que ha dado forma su familia durante generaciones. Desde hace 20 años, Lanz ha dedicado su tiempo a realizar su sueño, desarrollando su lenguaje personal, dentro de la escultura figurativa. Actualmente su obra se expone de forma permanente en el Centro del hierro y la forja de Lesaka.
Pinturas de Ana Marín y forja de Pedro Lanz
En la segunda sala muestra sus lienzos Javier Sagarzazu, que comparte espacio con las esculturas de Iñigo Manterola. Desde muy pequeño, Sagargazu siente inquietudes artísticas, descubre la pintura a través de paisajistas de Bidasoa que ve pintar en la alameda de Hondarribia, localidad que le vio nacer, y expone por primera vez en Irún en 1966. Desde 1975 compagina su trayectoria artística con la labor de docente.
El pintor y escultor Manterola, natural de Orio, empezó a pintar desde niño y no ha parado. Desde su salida de la facultad de Bellas Artes ha realizado diversos talleres, entre los que destaca el taller de pintura de 2006 ‘Maestros de la figuración’, con Antonio López y Juan José Aquerreta. Tras 15 años dedicado a la pintura, ha incorporado a sus proyectos otras disciplinas como la escultura, la fotografía y la instalación.
Las pinturas de Juan Carlos Pikabea (Lesaka) y las esculturas abstractas en madera de Lesabigel (lrún) completan ‘Arte para vivir y para soñar’ en la tercera sala. Pikabea cuenta con más de 30 años de recorrido en el mundo de la pintura. Autodidacta, su oficio y capacidad de observar a la naturaleza son claves en su pintura colorista y ágil. En su obra recrea el paisaje de su tierra, un paisaje que brota desde dentro. Lesagibel es un creador autodidacta cuya técnica abstracta en madera representa un intento de expresión estética recogiendo del pasado. A través de sus obras, busca un acercamiento a sentir la madera.
‘Arte para vivir y para soñar’ podrá visitarse hasta el 10 de diciembre en los días de apertura de IrriSarri Land. En noviembre estará abierto los fines de semana desde las 14 horas del viernes hasta el domingo por la noche. En diciembre, permanecerá abierto todos los días del 1 al 10 y del 22 al 7 de enero, además del fin de semana del 15 al 17.
