Con la llegada del verano regresa uno de los dulces más ansiados de esta época. Aunque lo puedes tomar todo el año, el hecho de que sea frío hace que resulte de lo más apetecible en verano. Almuerzo, postre, merienda… cualquier momento resulta bueno para disfrutar de su cremosa textura.
La canción que acompaña al camión del heladero despierta la nostalgia de muchos por su infancia cuando esperaban en verano a que sonara para pedirle a sus padres que le compraran uno; el mítico kiosko azul que decora tantas piscinas y playas y vive rodeado de gente que quiere refrescarse con un poco de dulzura helada; la heladería de las esquina en la que siempre dudas cuál escoger entre sus múltiples opciones y al final siempre acudes al mismo; o, incluso, sentarse en la sobremesa con la familia a disfrutar de un helado de postre. Los helados forman recuerdos y momentos que nos acompañan haciendo que sean algo más que un simple postre, convirtiéndose en un capricho, una forma de mimarnos, que nos alegra cualquier experiencia, no por nada está retratado como la receta perfecta para superar una ruptura o un mal día.
No obstante, el helado es algo serio para aquellos que se dedican a venderlos. Conocer los gustos del consumidor es un dato importante y es por ello que la International Ice Cream Association realizó una encuesta en los Estados Unidos sobre los sabores preferidos del público. Los gustos mostraron ser tradicionales, sin grandes sorpresas, donde la vainilla se convertía en la líder de la lista, votada por el 29%, y era seguida por la fresa y el chocolate. ¿Los has adivinado? Igualmente, en este top aparecían también otros sabores como dulce de leche, cereza, nata o banana split, creado este último a partir de la vistosa copa.
Sin embargo, al igual que muchos otros platos, los helados han ido evolucionando tanto en su presentación como su sabor. Creándose nuevos helados cada año y llegando a existir algunos tan extravagantes que hacen cuestionarse quién los tomaría y quién pensó que era buena idea.
Helados de bebidas como el de Red Bull o mojito ya son habituales en muchos sitios, aún más otros como el de chicle o el kinder bueno, y a algunos no les extrañará ver de sésamo o té matcha; pero, ¿qué pasa cuando hablamos de sabores como chorizo y caramelo, pizza o jamón serrano? Tal vez los grandes aficionados a la cerveza probarían uno de ese sabor y uno de palomitas o de curry con zanahoria puede combinar bien como acompañante de algún plato; sin embargo, otros sabores como la tortilla de patata, el pescado o el de ajo parecen más una opción a elegir en un reto con los amigos o cuando quieres gastar una broma. Es posible que la mejor forma de comercializar algunos de estos extravagantes sabores sea utilizarlos para el día de los inocentes o despedidas de solteros.
La industria heladera no parece tener límites en cuánto a sabores y es que vive en una constante innovación. Esto unido al furor de las redes sociales y el uso de estas como estrategia publicitaria ha llevado a que surjan heladerías especializadas en opciones de lo más ‘instagrameables’. Hace unos años se puso de moda un helado metido en un en una galleta, pero lejos de ser el típico sándwich de helado, este taiyakis consiste tiene la masa -con distintos sabores de galleta- con forma de pez y está relleno de un helado suave y cremoso de vainilla o chocolate que le sale por la boca.
Rellenos también son el de gofre chino, o puffle, que es más elástico y da la posibilidad de cerrarlo y rellenarlo de diversos helados y toppings, o los nuevos sándwiches personalizados con una galleta gruesa de cookie, lacasitos, clásica rellena de lo que quieras; con estas opciones las yogurterías con sus opciones de helado de yogurt al que puedes añadir lo que prefieras empiezan a parecer más simples.
El año pasado las redes parecieron llenarse de los helados tailandeses con forma de rollos. Vídeos de como trituraban las frutas y dulces sobre una tabla helada a la que le añadían la leche y la nata se viralizaron por Instagram y Facebook y el fenómeno llegó a España de la mano de Ice Wave. En 2019, la nueva moda son lo helados de nube, cucuruchos coronados por una nube hecha de algodón de azúcar de la que asoma el helado. Te guste probar cosas nuevas o seas más tradicional, prefieras los sabores extravagantes o disfrutes con los clásicos, tomar un helado es una experiencia que nos une a todos.