martes, 16 abril 2024

Amargo adiós a los dulces sin gluten de Tentacelia

La panadería y pastelería, situada en la pamplonesa calle de Mercaderes y reconocida por la calidad de sus productos artesanales para celíacos, cierra sus puertas tras un año y medio de vida. Uno de los socios del establecimiento cuenta a NavarraCapital.es los principales motivos que han provocado el fin de su actividad.


Pamplona - 18 diciembre, 2019 - 06:00

Ibáñez Millán cree que el segmento de los alimentos para celíacos sigue siendo muy atractivo. (Fotos: Víctor Rodrigo)

Tentacelia, una panadería y pastelería especializada en productos sin gluten y lactosa, cierra sus puertas tras un año y medio en la pamplonesa calle de Mercaderes. Concretamente, estaba ubicada hasta ahora en la mítica farmacia de los hermanos Ondarra.

El negocio se ubicaba hasta ahora en la calle Mercaderes.

El negocio se ubicaba en la antigua farmacia de los Ondarra, en la céntrica calle de Mercaderes.

Pese a ser un negocio que tuvo bastante aceptación en sus comienzos, debido a la alta calidad de sus panes y dulces, los tres socios del establecimiento se han visto empujados a dar por concluida su actividad. Bruno Lucas Ibáñez Millán, uno de los propietarios y encargado además de la tienda, confirma a NavarraCapital.es que el final se ha debido a «muchas razones y factores», a «muchos noes y obstáculos» que se han encontrado «por todas partes». 

La facturación era «buena» para un negocio todavía en fase de desarrollo, pero la realidad es que «no ha dado beneficios». La principal dificultad ha sido «mantenerse en el tiempo» porque, al final, la oferta y la demanda «son las que dirigen el mundo». 

Según Ibáñez Millán, la facturación era «buena» para un negocio todavía en fase de desarrollo, pero «no ha dado beneficios».

En esta línea, achaca las limitadas ventas de productos artesanales para celíacos a la expansión de las marcas industriales. “Las personas tenemos una psicología de compra concreta. Y cuando vamos al supermercado, queremos salir de ahí con todo, sin tener que ir a otro sitio. Ya no se valora tanto al artesano”, confiesa. 

La localización del establecimiento, aunque fuera céntrica, tampoco les ha ayudado en exceso. Así lo cree Ibáñez Millán. “La mayoría de los pamploneses no viven en el Casco Viejo, sino en el resto de la ciudad. A lo mejor, en Pio XII hubiera dado un resultado mejor. O quizás la fórmula de negocio que hemos llevado a Pamplona no ha sido la adecuada”, analiza. 

Tentacelia ofertaba una amplia gama de productos sin gluten.

Tentacelia ofertaba muchos productos sin gluten.

Aunque la empresa no ha evolucionado como esperaba, declara que el segmento de los alimentos para celíacos «sigue siendo muy interesante y próspero porque tiene poco tiempo de vida». Por eso y sin dudarlo un instante, confirma que volvería a crear una tienda de este tipo: «Si me he mantenido sin ser el momento apropiado, imagínate cuando sí lo sea. Con una buena estrategia, un buen equipo y dinero, se puede conseguir sin problemas». 

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