Ya se ha cumplido el ecuador de las fiestas navideñas. Pero aún quedan unas cuantas celebraciones marcadas en rojo en el calendario: Nochevieja, Año Nuevo, el día de Reyes… Por eso hay que ser conscientes de lo que se come y se bebe para no llegar a enero con un susto en forma de sobrepeso. Según el Informe sobre el Estado de Salud en España 2019, elaborado por la Comisión Europea (CE), los españoles están por debajo de la media de la Unión Europa (UE) en gasto sanitario público. Sin embargo, gozan de mejor salud que el resto de los europeos, pues tienen la esperanza de vida más alta de la UE, que alcanzó en el año 2017 los 83,4 años. Por el contrario, la tasa de obesidad ha aumentado entre los adultos: uno de cada seis españoles la sufría en 2017, mientras que en 2001 tan solo era uno de cada ocho. En consecuencia, conviene tomar precauciones.
La obesidad ha subido entre los adultos españoles: uno de cada seis ya la sufre.
Como explica el doctor Julio Maset, médico de Cinfa, disfrutar de las tradiciones de estas fiestas no está reñido con cuidarse: «Durante unos días, relajamos nuestras costumbres de todo el año. Pero bastan unas pocas semanas de abusar de las comidas copiosas, el alcohol y los dulces para que, además de coger unos cuantos kilos, aumente nuestro nivel de colesterol y azúcar». Para contrarrestar esto, el experto de Cinfa apunta que «es importante llegar a estos días con los deberes hechos, nutricionalmente hablando, y realizar un ejercicio de previsión las semanas anteriores».
Alrededor del 16 % del total de las muertes acaecidas en España hace dos años, unas 67.000, pueden atribuirse al tabaquismo (directo y pasivo). Mientras, los riesgos relacionados con la alimentación, como la escasa ingesta de vegetales, suponen el 12 % de los fallecimientos (52.000). Asimismo, cerca del 8 % (32.000) puede atribuirse al consumo de alcohol, y el 2 % (9.500) a la escasa actividad física.
En Navidad, los navarros ganan un mínimo de dos kilos.
Expertos del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) afirman que, en estas fechas, los navarros engordan una media de entre dos y cinco kilos. En parte porque una sola comida de Navidad puede suponer entre 2.000 y 2.500 kilocalorías, el equivalente a la dieta de un día completo. Pero lo ideal es que no sobrepase el 30 % de la ingesta calórica diaria, es decir, entre 450 y 750 kilocalorías en función del sexo, el peso, la edad y actividad física de la persona.
Por eso, planificar la cesta de la compra navideña también es fundamental. Se puede comenzar evitando que la tentación entre en casa. Para lograrlo, como informa Maset, es necesario pensar y diseñar bien los menús: «No es difícil encontrar opciones para la comida de Navidad o la cena de Nochevieja que, además de sabrosas, sean saludables. Por ejemplo, los menús que se basan en los pescados y mariscos, los que llevan de entrante o guarnición las verduras y hortalizas…».
Según Acierto.com, solo el 10 % de los españoles ajusta su dieta a una alimentación saludable.
Así que los expertos recomiendan ir al supermercado con la lista de la compra hecha. «De esta manera, pondremos en el carro únicamente los ingredientes y productos que necesitamos y en las cantidades justas. Tiempo y cabeza son claves», subraya el doctor de Cinfa.
Según un informe de Acierto.com, solo el 10 % de la población española ajusta su dieta a una alimentación saludable. Esta supone ingerir cinco piezas de verdura o fruta al día, desayunar de manera equilibrada y sin la presencia en grandes cantidades de la sal o el azúcar, así como completar la base de la nutrición semanal con legumbres.
EL DECÁLOGO DE CINFA PARA NAVIDAD
- Diseña el menú con antelación. Dedica tiempo a planificar tu menú, para que sea festivo y suculento sin necesidad de caer en cantidades exageradas de alimentos hipercalóricos.
- Haz la lista de la compra. Es la mejor manera de ajustarse a lo que verdaderamente se necesita y, sobre todo, de no caer en las tentaciones.
- Planea el recorrido en el súper y proponte un tiempo límite. De esta manera, no te entretendrás comprando lo que no necesitas.
- Adquiere solo las cantidades que necesites. Ofrecer raciones individuales te resultará más económico, ya que calcularás mejor y todo el mundo comerá lo que debe, sin excesos.
- Compra pensando en asar o cocinar a la plancha. No es necesario que te compliques con grandes piezas de carne o marisco, acompañados de salsas cremosas,ni con guisos elaborados.
- Acompaña con verduras. Di no a las patatas fritas y sí a los pimientos, berenjenas, calabacines…
- Innova con frutas. Tanto las frutas de temporada como las tropicales pueden formar parte de los entrantes fríos y de los postres más saludables y originales.
- Mantén a raya el alcohol. Aunque los vinos, el champán, las copas y los licores nunca faltan en los eventos navideños, abusar de ellos puede provocarnos la temida resaca y una ingesta de calorías vacías.
- Y después de comer, ¡muévete! Si es posible, lo más recomendable es salir a pasear. Además de hacer mejor la digestión, estarás realizando actividad física, tomando aire fresco y pasando un rato muy agradable.
- No te olvides del resto de días no festivos. Completa la compra con alimentos saludables que no hayas incluido en los menús de los días festivos. Así compensarás los excesos de los banquetes.
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