El complejo turístico-residencial Maraey prevé contar con cuatro hoteles de cinco estrellas, condominios residenciales, una reserva natural y varios centros educativos y deportivos. Este proyecto, que se desarrollará en 850 hectáreas en Costa del Sol, contempla una inversión de más de 11.000 millones de reales brasileños en el plazo de catorce años (más de 2.000 millones de euros) y prevé generar hasta 52.000 empleos directos durante la obra, así como 18.000 directos y otros tantos indirectos una vez esté operativo.
La iniciativa está siendo desarrollada por IDB, compañía integrada por empresarios españoles, brasileños, estadounidenses y chinos que trabaja bajo el liderazgo del Grupo Cetya y el Grupo Abacus (propiedad de las familias navarras Senosiáin e Izquierdo respectivamente). Según detalla el sitio web del proyecto, este fue declarado “emprendimiento estratégico para el Estado de Río de Janeiro el pasado febrero” y recibió el mes pasado, según añaden varios periódicos nacionales, las autorizaciones pertinentes para su construcción.
Los promotores del proyecto esperan que el complejo facture anualmente unos 246 millones de euros y reciba una media de 300.000 turistas.
En concreto, sus promotores esperan que este complejo turístico reciba una media de 300.000 turistas al año y que atraiga más de 118.000 viajeros al aeropuerto de Maricá, ya que se sitúa a 8,5 kilómetros de esta localidad y a 45 kilómetros del centro de Río de Janeiro.
Según el grupo IDB, el complejo generará al país, durante su construcción, unos 7.200 millones de reales brasileños en impuestos (1.360 millones de euros). Y, cuando esté en funcionamiento, la empresa prevé facturar unos 1.300 millones de reales brasileños anuales (246 millones de euros) en los cuatro hoteles, además de pagar más de 1.000 millones (189 millones de euros) en impuestos.
UNA RESERVA Y UNA UNIVERSIDAD
Además, Maraey proyecta crear la segunda mayor Reserva Particular de Patrimonio Natural (RPPN) de restinga en el Estado de Río (y la quinta mayor de Brasil), así como un centro de investigación académica para “profundizar en el conocimiento de los ecosistemas de la región”. De esta forma, contempla preservar “el 81 % del área total” y una ocupación edificatoria del 6,6 %.
Al mismo tiempo, prevé la construcción de una universidad de dirección hotelera y alta cocina, un hospital y una escuela de excelencia, que generarán “unas 3.700 plazas de enseñanza”. También centros deportivos, un centro comercial y otros servicios.
UNA INICIATIVA CON SELLO NAVARRO
Los “ideadores” del proyecto, según detalla la web de Maraey, son Kiko Senosiáin, presidente del Grupo Cetya, y Emilio Izquierdo Jiménez, fundador del Grupo Abacus y ex director general de Industria en el Gobierno de UPN entre 1996 y 1999. Al mismo tiempo, Emilio Izquierdo Merlo es el CEO de IDB y Maraey desde finales de 2017, tras su paso por la dirección del grupo familiar con sede en Madrid.
Graduado en Derecho por la Universidad de Navarra, Izquierdo Merlo cuenta también con tres másteres: uno de Negocios Internacionales por la Grenoble Ecole de Management, otro de Gestión de Negocios Inmobiliarios por la Universidad Pontificia Comillas y un MBA por IESE Business School.
También ha ejercido como abogado en Aricam, como manager de Catálogo Global en Hewlett-Packard y como director general en el Grupo Ámbito Internacional. En 2009 se incorporó a Abacus como CEO, mientras su padre ejercía como presidente.
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