La cuota del comercio electrónico es cada vez mayor y en Navarra aumenta a un ritmo superior al de otras regiones. Los comerciantes creen que es la principal amenaza para sus negocios, aunque también reconocen que por el momento las ventas on line representan un porcentaje muy bajo comparadas con las que se hacen en las tiendas.
Según los resultados de una encuesta difundida recientemente por la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos del sindicato UGT (UPTA-UGT), para el 39% de los titulares de los establecimientos comerciales de Navarra las compras por internet son el factor que influye de una forma más negativa en la marcha de sus negocios. Después citan la competencia que suponen las grandes superficies (36%) y los problemas de la clientela, sobre todo en Pamplona, para aparcar sus vehículos (25%).
¿Hasta qué punto concuerdan con la realidad las apreciaciones de los comerciantes sobre la amenaza de internet? Resulta difícil saberlo porque los datos difieren según quien los ofrezca. Si nos atenemos a los del Instituto de Estadística de Navarra (Nastat) el impacto sería relativo porque el índice de comercio al por menor en términos constantes ha registrado un crecimiento del 1,8% en diciembre respecto al mismo mes del año anterior, y en el conjunto del año 2017 el crecimiento estimado se sitúa en el 2,6%. Además, señala que el empleo en el sector de comercio minorista de la Comunidad Foral ha crecido el 1,4% en el conjunto del año 2017. 
Las compras on line han crecido en 12,6 puntos desde 2014 y hasta 2016 en Navarra
La tendencia que marcan estos porcentajes, que son superiores a los medidos para el conjunto del país, difiere de la que apuntan los datos ofrecidos por UPTA-UGT, que sostiene que el número de comercios existentes en Navarra al finalizar 2017 era de 10.295, después de que a lo largo del año hubiesen cerrado 214. Según la encuesta realizada por el sindicato, el 57% de los comerciantes indicaron que sus ventas en 2017 eran similares a las del ejercicio anterior, mientras el 25% aseguraba que fueron inferiores y sólo un 18% reconocía que habían aumentado. Otros datos facilitados por los propios comerciantes, siempre basados en encuestas, ofrecen resultados negativos sobre la marcha de sus negocios.
Lo cierto es que el comercio electrónico parece crecer en Navarra. De acuerdo con los datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), un 30,4% de la población de la Comunidad Foral había adquirido bienes o servicios para uso privado por internet en 2014, porcentaje que al año siguiente ya había ascendido al 33,8% y en 2016, último año con datos disponibles, subió hasta el 43%, lo que la sitúa en la segunda posición por detrás del País Vasco, donde un 43,2% de sus habitantes compraron por internet en 2016. 
Sin embargo, mientras en Navarra el porcentaje ha crecido en 12,6 puntos desde 2014 y hasta 2016, en la comunidad vecina lo ha hecho en un 8,1%, hasta quedar prácticamente igualadas. Es decir, el incremento de las personas que compran por internet es notablemente mayor en Navarra y, de haberse mantenido en 2017, los navarros seremos ya los que más utilizamos el comercio electrónico de todo el país. La opinión de los comerciantes sobre la competencia que representa internet y su efecto negativo sobre sus negocios estaría, por tanto, justificada.
IMPOSIBLE COMPETIR
No existen cifras concretas del volumen económico que mueven las compras on line en Navarra, aunque ha circulado la cifra global de unos 400 millones de euros anuales. Sí se sabe que adquirimos, sobre todo, ropa y complementos de moda, libros, entradas para espectáculos y viajes. Amaya Villanueva, gerente de Ensanche Área Comercial, considera que esa cifra es exagerada, “porque la estadística dice que en España el comercio on line representa el 3 o 4%, y aunque está creciendo muchísimo sigue siendo un porcentaje bajo en relación con lo que se vende en el comercio físico”.
El estudio de UPTA-UGT desvela que el 79% de los navarros de entre 15 a 30 años compran habitualmente por internet frente al 21% que prefieren ir a la tienda, porcentajes que en los que tienen entre 30 y 50 años son el 66 y el 34%. Los mayores de 50 años optan, en un 72%, por acudir a los comercios y el 28% utilizan internet para sus adquisiciones, de lo que se deduce que la mayoría de las personas que van a las tiendas tienen cierta edad y se está interrumpiendo la renovación de la clientela.
Amaya Villanueva: «La Administración nos dice que tecnológicamente debemos ponernos al día, pero no da ayudas»
El 73% de los comerciantes ni siquiera contemplan la posibilidad de abrir su propia tienda on line porque no les salen las cuentas. Teniendo en cuenta que su edad media supera los 55 años consideran que no amortizarían los gastos derivados de contar con una web de compras, hacer frente a las devoluciones y contratar el reparto, algo que confirma Amaya Villanueva, que apunta que resulta “complicado” para los comerciantes contar con su propia web de ventas, porque conlleva gastos difíciles de asumir, exige contar con un stock adicional y además sería necesario contar con una persona que la atendiera.
“Tenemos que resignarnos a que venga la gente a probarse la ropa o los zapatos, para asegurarse de la talla y de que les sienta bien, que luego pedirán por internet”, indica la encargada de un local de la calle Iturrama de Pamplona que duda de que aumentaran sus ventas disponiendo de una tienda on line: “Los plazos de entrega son cada vez más cortos, te lo llevan a casa… es imposible competir en su terreno con Amazon, El Corte Inglés o las grandes marcas de ropa”.
Cabe una vía intermedia, la de agruparse varias tiendas en un dominio Market Place del que comparten los gastos de explotación y les permite entrar en el mercado de internet con unos gastos moderados. Es una posibilidad que baraja hasta el 27% de los titulares de un comercio, que reconocen que su supervivencia pasa por adaptarse a las nuevas tecnologías y a los cambios sociales. Amaya Villanueva señala que, efectivamente, “desde las administraciones se nos dice que el comercio debe ponerse al día tecnológicamente, vender on-line, estar en las redes sociales, contar con página web y demás, pero luego las ayudas que el Gobierno de Navarra ha ofrecido para estos temas TIC apenas han llegado al comercio porque podía acceder a la convocatoria cualquier tipo de empresa, y ahí poco se puede hacer frente a grandes industrias con proyectos mucho más ambiciosos”, afirma la gerente de Ensanche Área Comercial, quien lamenta que la convocatoria estuviera dotada tan sólo con 120.000 euros.
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