La directiva europea 2010/13 obligará a extender a todos los edificios de vivienda que se construyan a partir de su entrada en vigor en el año 2020, la construcción basada en unos parámetros que le permitan considerarse Edificio de Consumo Casi Nulo (EECN, por sus siglas en inglés). Cada constructora es libre de seguir unos u otros parámetros de eficiencia energética que aseguren que el consumo de dicho edificio sea prácticamente nulo.
Alemania lleva más de 25 años trabajando en eficiencia energética con el Instituto Passivhaus, un instituto privado que no está formado por arquitectos sino principalmente por físicos. Este Insituto ha establecido unas pautas a seguir en el diseño y obra de edificios para conseguir un consumo casi nulo. 
EL PRIMERO DE ESPAÑA
«Estos estándares Passivhaus se han desarrollado en varias viviendas unifamiliares y rehabilitaciones privadas en Navarra desde hace unos pocos años. Sin embargo, no es hasta el año 2015 cuando Promociones Las Provincias decide realizar un edificio de viviendas colectivo bajo estos estándares de EECN según los criterios del Passive House Institute. Este promotor cuenta con nosotros para que hiciéramos este proyecto. Nosotros en aquel momento, en 2015, no teníamos experiencia en la ejecución de una obra tan rigurosa como el Passivhaus donde se van midiendo escrupulosamente todos los parámetros durante la obra y al final de la misma”, ”, explica Guillermo Beguiristáin, director técnico de Erro y Eugui.
El edificio Thermos de 29 viviendas en Soto Lezkairu, proyecto de los arquitectos Germán y Sara Velázquez, es el primer edificio de viviendas de España certificada en Passivhaus. Por otro lado, el pasado año NASUVINSA se ha acogido también a este estándar para la construcción de VPO en alquiler, sacando cuatro promociones bajo estos estándares de los cuales Erro y Eugui va a llevar a cabo 42 viviendas en Entremutilvas, y 62 viviendas en Ripagaina
Hasta ese momento, ya se habían construido en Navarra viviendas unifamiliares Passivhaus y algún edificio público, pero no viviendas en bloque. Para ello, Erro y Eugui tuvo que formar a todas las personas que participaban en el proyecto desde el jefe de obra, el encargado, personal propio y resto de colaboradores que intervinieron en la obra. “Los materiales principales no cambian con respecto a otras construcciones, pero sí la forma de trabajar”, añade Beguiristáin.
El Passivhaus es un certificado muy riguroso que asegura que, siguiendo sus pautas, se construya un edificio CCN.
CARACTERÍSTICAS DEL PASSIVHAUS
Las pautas que establece el estándar Passivhaus se basa en cinco puntos principales que abordan aspectos de diseño y ejecución.
El aislamiento térmico: se mejoran los aislamientos y se aumentan los espesores de los mismos de tal forma que se garantice un alto grado de aislamiento para no permitir que las altas o bajas temperaturas penetren en la vivienda y poder mantener una temperatura regular que dependa más de lo que sucede en el interior que en el exterior. Se pone especial cuidado en las juntas y los solapes de aislamiento. La envolvente de aislamiento de todo el edificio debe rodear todo el edificio, es decir no debe haber ni un solo punto sin aislamiento. Dependiendo del clima, optimizas los espesores. No es lo mismo los espesores que pueden pedirte en Murcia que en Gerona. Dependiendo de la situación geográfica y el clima, necesitas un espesor diferente”, explica el director técnico de Erro y Eugui. 
Ventanas y puertas de altas prestaciones. Desde un punto de vista térmico, las puertas y ventanas pueden ser uno de los puntos débiles de una vivienda ya que son focos de posibles pérdidas de calor y frío. Tanto es así que la colocación y ubicación de las mismas es uno de los puntos principales que el diseño de una casa pasiva debe recoger para conseguir una vivienda eficiente. Una buena calidad de las mismas, vidrios triples y una correcta instalación es fundamental para conseguir una alta eficiencia energética
Ausencia de puentes térmicos: los puentes térmicos son puntos de los edificios donde se producen pérdidas (o ganancias en verano) de calor excesivo. “En edificación es muy difícil no tener puentes térmicos pero el objetivo en Passivhaus es tener el mínimo número de ellos y los que tengas, cuantificarlos, para ver cómo están penalizando al edificio energéticamente hablando”, especifica Beguiristáin.
Hermeticidad al aire: se pretende evitar pérdidas o ganancias de aire del exterior a interior y viceversa. Se controla que no haya infiltraciones de aire indeseadas. Se hacen ensayos de presión para controlarlo. “Para el estándar Passivhaus, la cantidad de aire máxima que puede perder la vivienda sin controlarla sería del tamaño de una pelota de pin pon. Pensemos en cualquier casa, las cajas de persiana, holguras en carpinterías exteriores… son zonas donde constantemente se pierde aire, que es pérdida de energía y por tanto de euros…”.
Ventilación mecánica: Teniendo todo esto asegurado, debemos controlar el aire que entra y sale para poder vivir. “Con la ventilación mecánica se realiza una renovación continua y controlada del aire interior de la vivienda, de manera que se garantiza la buena calidad del aire en la vivienda. Este sistema también incorpora un sistema de filtros que depura el aire, evitando la entrada al interior de la vivienda de partículas contaminantes o que pueden producir alergias como granos de polen, polvo o ácaros. Además, mediante el sistema de recuperación de calor se consigue atemperar el aire que se introduce en la vivienda aprovechando la energía calorífica del aire que se extrae antes de expulsarlo al exterior.«. 
INVERSIÓN A LARGO PLAZO
Aunque a priori pueda encarecerse el precio de la vivienda por los costes de construcción (un 5-10% más), a largo plazo se consigue un ahorro importante de consumos energéticos que evidentemente constituye también un ahorro de dinero.
“Hay que mirarlo como una inversión. Cuando una persona va a comprarse una vivienda, suele fijarse en la zona, el número de habitaciones, si tiene salón grande… debemos preocuparnos también porque sea eficiente energéticamente”.
Aunque cada unidad familiar es diferente (no es lo mismo vivir uno solo que una familia de 4 miembros) ni el número de horas que se estén en casa y el consumo que hagamos, una vivienda estándar de 90 m2 puede gastar entre 700-800 euros de media de gas al año. En una vivienda Passivhaus este coste sería de entre 75-80 euros.
Una vivienda estándar de 90 m2 puede gastar entre 700-800 euros de media de gas al año. En una vivienda Passivhaus este coste sería de entre 75-80 euros.
“No hay que olvidar por otro lado, que hay que hacer un uso responsable de la vivienda. Hay que aprender a utilizar este tipo de viviendas. No es complicado, pero es parte de mantenimiento de la casa. No es lo mismo tener suelo cerámico que de madera, no hay que desperdiciar el aire y abrir las ventanas de manera irresponsable…”. 
Como se ha señalado al principio, todos los edificios deberán ser para 2020 Edificios de Consumo Casi Nulo y cada constructora podrá seguir unas pautas u otras. La construcción está experimentando de nuevo un impulso tras los duros años de la crisis, sin embargo, se enfrenta a otro nuevo problema. La falta de mano de obra cualificada. “En los últimos años, son muchas las personas que han cambiado de sector o se han retirado o jubilado. No ha habido relevo generacional y no hay personal formado. Ahora que vuelve a resurgir el sector de la construcción tras la crisis, nos encontramos una falta de mano de obra especializada terrible. Las empresas están teniendo serios problemas para encontrar mano de obra cualificada”, termina Beguiristáin.
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