La presidenta de Navarra, María Chivite, mantuvo este martes un encuentro institucional con el presidente de Indra, Marc Murtra, en el que repasaron los posibles proyectos de la empresa en Navarra y los retos de la transformación digital, tanto del sector público foral como de las empresas privadas de la comunidad. Durante la reunión, ambos estuvieron acompañados por el vicepresidente primero del Gobierno de Navarra, Félix Taberna, y Juan Moscoso, miembro del consejo de administración de la empresa.
Antes del encuentro institucional, todos ellos visitaron las instalaciones de Eosol en Mutilva, donde fueron recibidos por su director ejecutivo, Bruno Bernal. Según informó el Ejecutivo foral, Eosol es uno de los proveedores de Indra en el proyecto Startical, que prevé la fabricación de una constelación de pequeños satélites de comunicaciones «para el control del tráfico aéreo». En concreto, la firma navarra diseña y fabrica desde Mutilva la antena de comunicaciones de los satélites, que «es uno de sus componentes fundamentales».
La entrada en el llamado sector del NewSpace es una de los objetivos estratégicos de Indra, tal y como detalló la empresa en su reciente presentación de objetivos estratégicos, titulada ‘Leading the furure’. La compañía prevé invertir más de 3.000 millones de euros en nuevos desarrollos tecnológicos hasta 2030 y «prevé la consolidación de su negocio aeroespacial como uno de sus principales objetivos».
Durante su visita a Eosol, Chivite pudo conocer de cerca este proyecto, así como el resto de áreas de negocio de la empresa, dedicada a servicios de ingeniería en sectores como energía, industria, automoción, edificación, infraestructuras, telecomunicaciones, industria aeroespacial o defensa.
Eosol fue fundada en 2008 y cuenta con un 70 % de capital navarro. Actualmente emplea a más de 700 personas en sus oficinas repartidas por nueve países, casi 200 más que a finales de 2021, aunque mantiene sus servicios centrales en Mutilva. En 2023, su cifra de negocio alcanzó los 50 millones de euros.