Hablamos con Manuel García, fundador de esta enseña madrileña y todo un ejemplo de emprendimiento, un hombre que no sólo ha creado una firma sino todo un universo en el que encontramos artistas, actores y demás referencias culturales.
Manuel García.
El tuyo es quizás el mejor ejemplo de que el trabajo es sinónimo de éxito. ¿Cómo se defiende una firma en plena crisis?
Pues como dices, trabajando mucho. Evolucionando con cada colección. Observando todo lo que pasa a tu alrededor e innovar, sin perder el origen de la marca y con una mirada hacia donde se quiere llegar. Escuchar mucho a los clientes y adelantarse a lo que están pensando.
El éxito está en la calidad y la humanidad de la marca, manteniendo el contacto con clientes, amigos y toda la gente que nos ha apoyado.
Con más de una década a tus espaldas, has sido testigo e incluso protagonista de la transformación del hombre, ¿en qué han cambiado sus gustos a la hora de vestir?
En estos momentos vivimos en un torbellino de información que hace una década no existía, esto hace que nos lleguen muchos estímulos sobre tendencias, estilos, colores, materias incluso personajes. Y esto influye en la hora de vestirse, hasta para querer rebelarse de tanta norma y tanto dictado.
¿Cómo se debe llevar el traje en el siglo XXI?
Con naturalidad. Hay bastante gente que asocia llevar traje con algo rancio o incluso conservador, y deben saber que hay muchos tipos de traje y muchas opciones que se adaptan perfectamente a la personalidad de cada uno. 
La moda masculina siempre parece más estática y limitada. A la hora de afrontar tus diseños, ¿cómo lo haces?
Básicamente, observando la calle y escuchando a mis clientes. Partir de buenos materiales, tejidos nobles de primera calidad y darles un corte que nos llene de vida y salten de la pasarela a la calle. Para mí una colección que no está en la calle no es una colección viva.
¿Hay algún icono de estilo que te sirva de inspiración o de referencia?
No creo en los iconos. Un icono puede fascinarte en cuestión de segundos y dejar de hacerlo a la mañana siguiente. Son falsos ídolos que se crean. Me parece más interesante algo que esté vivo como la calle, algo artístico, algo que te emocione.
Todo el mundo García Madrid tiene muchas referencias al arte, ¿qué lugar ocupa en la empresa?
Siempre nos hemos sentido muy cercanos y vinculados a la cultura y a la creación artística, apoyando a jóvenes promesas y colaborando con ellos. Así hemos podido ir formando una pequeña colección donde se mezclan cosas muy interesantes y que compartiremos con todos en breve. Esta mezcla también me ayuda a inspirarme a la hora de crear mis colecciones: texturas, colores, ese toque de poesía y de locura imprescindible. 
Y además, también os embarcasteis en un proyecto editorial, ¿qué aporta a la firma?
La satisfacción de haber creado un contenedor de cosas bonitas, reflejo del talento entusiasta de muchos colaboradores y poder compartirlo con todo el mundo.
Tus tiendas siempre son algo más que una mera tienda de ropa, ¿es la evolución normal de la monomarca?
Desde que empezamos, hace ya algo más de 12 años, hemos querido compartir experiencias, no ser únicamente una tienda para vender sino un espacio donde hay intercambio de ideas, de sensaciones y mucha comunicación.
Sabes lo que es una expansión internacional, ¿qué necesita una firma para poder dar ese paso?
Primero, conocer bien el canal para poder desarrollarse. Tener una historia que contar y un producto de calidad que pueda llegar a todo el mundo, traspasando fronteras.
Has desfilado fuera y dentro de Ifema, ¿con qué te quedas?
La difusión que alcanzas en los medios es enorme. Charo Izquierdo, cabeza visible de Ifema y directora de la pasarela, junto con su equipo, nos ha apoyado y hemos sido la primera firma de moda masculina en formar parte del calendario de desfiles.
Charo Izquierdo y Manuel García.
También tenemos muy buenos recuerdos de aquellas presentaciones más independientes, donde la creatividad y los presupuestos ajustados nos hacían crear universos maravillosos. Una energía que fluye y logra convertir una colección de hombre en algo deseado, distinto y capaz de llegar a un amplio número de público.
¿La moda masculina ocupa el lugar que se merece?
Avanzamos. La moda masculina ha tenido una transformación muy lenta y a veces ha arriesgado poco, aportando novedades muy de cuando en cuando. Nos movemos en una industria enfocada principalmente hacia el mundo femenino, pero los creadores de moda masculina estamos ofreciendo cosas distintas, atractivas.
Como marca, en GARCIA MADRID hemos sabido combinar la parte de riesgo, aventura y un toque personal con la parte de oficio y tradicional, por lo que nos hemos colocado al mismo nivel que las colecciones de mujer. La mejor prueba de eso es el deseo que hemos creado en el mundo femenino de querer vestir nuestros trajes.
Recibisteis el Premio Nacional al Emprendimiento de la Industria de la Moda, ¿qué ha supuesto ese reconocimiento?
Tiene un gran valor, porque es el reconocimiento de los profesionales del sector a un trabajo que llevamos haciendo más de doce años como marca y también a nivel personal, con más de veinticinco en esta industria.
¿Cómo se presenta el futuro? ¿Algún reto que se presente en el horizonte?
Hacer realidad cada día nuestro lema, en continua evolución. Seguir ampliando nuestro servicio personalizado de sastrería a medida y el gratificante mundo de las bodas. Tampoco descartamos la posibilidad de unir fuerzas con una gran empresa que nos ayude a crecer estructuralmente y alcanzar nuevos retos de expansión. Lo mejor está por llegar.
Un reportaje para VanityCapital de José Luis Diéz-Garde 
