«Me levanté un día y le dije a mi madre que quería jugar a béisbol. Ni siquiera sabía bien en qué consistía, pero me llamaba la atención más que cualquier otro deporte», confiesa Luis Huici a Capital Sport. Con solo ocho años, y después de probar numerosas actividades en el colegio, comenzó a practicarlo. Primero lo hizo en el Arga de Burlada y, después, en Irabia: «Me encantó. Con diez años empecé a ir con la selección navarra infantil a campeonatos nacionales…», rememora.
Con el dorsal numero siete y el apodo de ‘Wizi‘, comenzó a jugar como segunda base aunque, al poco tiempo, descubrió que su sitio era la posición de catcher: «Es la persona que dirige el partido después del entrenador y el único jugador de los nueve que hay en el terreno de juego que está de cara al resto. Ve todas las estrategias de las jugadas y reparte el juego. A base de entrenar muchas horas, fui aprendiendo a manejar al equipo».
«El ‘catcher’ es el único jugador que está de cara al resto. Ve todas las estrategias de las jugadas y reparte el juego»
Mientras evolucionaba como jugador, Huici encontró otra pasión: la guitarra. Un instrumento que le acompañaría incluso más lejos que su guante de béisbol. «Mi primera banda se llamaba Saludos. Desde aquel momento, no dejé de componer y tocar».
Debutó en la máxima categoría con diecisiete años y también tuvo la oportunidad de viajar a multitud de destinos para jugar. «Todos los veranos iba a campeonatos de España con la selección navarra, participábamos en torneos europeos… Recuerdo que entonces veía mi futuro como jugador de los Yankees. Y en la música quería ser como Robe Iniesta o Billie Joe. Pero, con los años, va cambiando la perspectiva de todo…».
Pudo disfrutar de una época de bonanza para este deporte en Navarra. Pero la situación ha cambiado. «Tuvimos mucha suerte porque, al ser una disciplina minoritaria, la oferta deportiva local no era tan fuerte y, por lo tanto, si querías jugar partidos de nivel tenías que viajar. Además, había subvenciones del Gobierno de Navarra que lo impulsaban. Ahora no pasa por su mejor momento. El béisbol necesita ayuda. Hace tiempo se habló de hacer un campo en Ripagaina, pero son proyectos que requieren de una gran inversión y no acaban de salir adelante. Es una pena».
«El béisbol necesita ayuda. Hace tiempo se habló de hacer un campo en Ripagaina. Son proyectos de gran inversión que no acaban de salir adelante. Es una pena»
De hecho, Huici no se ha desligado del todo de este deporte, aunque ahora trabaja desde fuera de la cancha. En concreto, colabora con Béisbol Navarra para intentar impulsar esta disciplina.
«Me da mucha pena no poder seguir compitiendo e intento seguir aportando de la manera que puedo. Ayudo en temas relacionados con patrocinios, marketing, diseño de camisetas… Nuestro béisbol, que ha tenido niveles europeos muy altos, ahora mismo no alcanza esa altura, aunque poco a poco parece que se van haciendo programas para crear cantera».
UN NUEVO CAMINO
Vivir del béisbol en España resulta muy complicado. Así que Huici decidió emprender nuevos proyectos. «Cuando llegas a categoría semiprofesional, aparece otro tipo de prioridades», indica. Con el fin de especializarse en el entorno empresarial, su ‘plan B’ fue estudiar la carrera de Economics Leadership and Governance en la Universidad de Navarra: «Quería formarme en algo relacionado con la empresa porque mi sueño desde pequeño ha sido desarrollar una idea con la que solucionar algo. Además, esta carrera mantenía esa vertiente de estrategia que tanto me gusta».
Huici es vocalista y guitarrista de Black Friday.
A medida que fue avanzando su vida universitaria, se vio obligado a dejar de lado la alta competición. «El nivel deportivo era muy alto. Tenía que entrenar cuatro días a la semana y el fin de semana había que viajar por toda la Península para jugar partidos. Salíamos el viernes por la tarde y volvíamos el domingo por la noche en muchas ocasiones. Ya empezaba a pesar porque tenía otros proyectos», relata.
En paralelo, empezó a dar más prioridad a su grupo de música, Black Friday. «Después de Saludos, monté una nueva banda con otros compañeros que conocí en la universidad. Empezamos en 2015 y acabamos de sacar un nuevo single, que se llama ‘El porqué’. Es una canción que habla de no olvidarnos de dónde venimos y de los motivos que tenemos para seguir adelante. La clave está en volverse a levantar».
Sus primeros pasos en la empresa fueron en Siemens Gamesa. Y en este momento, el navarro compagina los conciertos y ensayos con su labor dentro del Equipo de Ventas Internacionales de GM Global Solutions: «Trabajo como responsable de varios proyectos en Reino Unido e Italia y, además, organizo eventos en otros lugares. Mis funciones son preparar la estrategia de ventas y de marketing para estos países. La parte de viajar es una de las que más me gustan». De hecho, en esta entrevista habla desde Düsseldorf (Alemania), donde se encuentra preparando la feria internacional de retail EuroShop 2023.
BLACK FRIDAY VUELVE CON FUERZA
El grupo navarro, del que Luis es guitarrista y vocalista, está compuesto por seis personas. Y vive una trayectoria en claro ascenso. Tras varios años de trabajo, Black Friday logró grabar sus canciones con grandes discográficas. «Firmamos con A3media, Universal y Acustic. Y nuestro último concierto fue en Madrid», desgrana antes de adelantar que el 11 de marzo tocarán en Pamplona.
En vez de producir discos enteros, sus integrantes cuelgan las canciones una a una en plataformas. Comenzaron a trabajar con este modelo en 2016 y hoy en día lo mantienen. «No hacemos discos, hacemos publicaciones», asiente. Su idea, en este sentido, pasa por lanzar un tema al mes: «Tenemos la ayuda de nuestro mánager, Hector Olaizola, pero suelo gestionar los derechos. Para mí, la música es un proyecto que mezcla mis dos mundos: la empresa y la béisbol. Combina estrategia, gestión y equipo».
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