Responsables de Laboral Kutxa informaron de que su entidad «ha cumplido de manera exigente» los requerimientos derivados de la nueva Directiva Europea sobre Mercados de Instrumentos Financieros, MiFID II, que entró en vigor el pasado 3 de enero.
De este modo, según dichos gestores, «la práctica totalidad» del personal relevante de Laboral Kutxa, un 98% de las personas afectadas por dicha normativa, ha completado ya el proceso formativo que los cualifica para desarrollar su actividad de información y asesoramiento en materia crediticia a su clientela potencial o actual.
El diseño y ejecución de los contenidos así como el material de estudio se ha llevado a cabo con Mondragon Unibersitatea.
En concreto, son 1.551 profesionales los que ya cuentan con la certificación requerida que, en este caso, corresponde con dos tipos de grados formativos: el de ‘Experto Universitario en Asesoramiento Financiero’ y el de ‘Especialista de Informador Financiero‘.
El primero, de 90 horas de duración, ha estado dirigido a aquellas personas que realizan funciones de información para garantizar a los asesorados que reciben un tipo de información clara y relevante sobre productos y servicios de inversión. Por su parte, el segundo, de 150 horas, lo ha recibido aquellos profesionales que, además de informan, asesoran en materia crediticia. En este caso, de nuevo, se pretende que los productos que se ofrezcan se adecuen a las necesidades y objetivos de la inversión.
MAYOR TRANSPARENCIA, MÁS PROTECCIÓN
Con vistas a 2018, el plan de formación contempla el reciclaje continuo de una plantilla ya cualificada y, a su vez, prevé certificar también a aquellos profesionales que no están obligados por la Directiva.
Cabe recordar, a este respecto, que el MiFID II es una disposición legal de derecho comunitario que vincula a todos los Estados miembros de la Unión Europea y que ha sido transpuesta parcialmente al derecho español a través de la aprobación, el pasado 29 de diciembre, del correspondiente Real Decreto. En él se detallan algunos aspectos de la Directiva referida anteriormente y que afectan, sobre todo, al funcionamiento del mercado y de sistemas de contratación así como a los nuevos regímenes sancionadores.
El objetivo último de toda esta legislación así como de la formación impartida entre los profesionales de Laboral Kutxa es, por tanto, la de asegurar una mayor transparencia, protección y competencia sobre los servicios y productos de inversión que forman la cartera comercial de la citada entidad financiera.
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