Volkswagen Navarra ha estrenado su nuevo almacén secuenciador de carrocerías tras realizar una inversión de 13 millones de euros, de los que 3 corresponden a trabajos de infraestructura y 10 a las instalaciones habilitadas.
La nueva equipación permite guardar carrocerías de mayor tamaño y duplica, con un espacio para 400 unidades, la capacidad del almacén actual, que dejará de estar operativo el próximo verano y se desmontará a finales de año
El proceso de construcción del nuevo almacén de carrocerías comenzó en verano de 2016 con el desmontaje de la antigua instalación de TTS-KTL, ubicada en la nave 2 de la fábrica, junto al actual almacén.
En su lugar, y con unas dimensiones de 90 metros de largo y 24 metros de ancho, se construyó un foso en el que se ha levantado la nueva estructura, que tiene 10,5 metros de altura.
El nuevo almacén posee tres transelevadores que permiten realizar un almacenaje automático de las carrocerías. Cada uno de ellos da servicio a 128 celdas (64 a cada lado repartidas en 4 alturas diferentes).
Por su parte, cada una de las celdas, con unas dimensiones de 5 metros de largo, 2 metros de ancho y 2 metros de alto, está diseñada para almacenar una carrocería o 4 ‘skids’ (sobre los que se trasladan las carrocerías) apilados.
UBICACIÓN ESTRATÉGICA
Ubicada a medio camino entre las naves de Pintura y Montaje, la nueva infraestructura sirve para secuenciar el flujo de carrocerías que entran en el taller de Montaje.
El nuevo almacén incorpora en todos sus elementos tecnología de última generación, tanto en su técnica de transporte, gestionada por cinco autómatas, como en la identificación por radiofrecuencia de las propias carrocerías (sistema RFID), que permite secuenciar los diferentes pasos del proceso con un mayor peso de la programación.
Además, el almacén ha permitido añadir 450 nuevos skids y un espacio para su propio almacenaje.
“Esta obra representa un paso importante, tanto por duplicar la capacidad del almacén actual como por modernizar el propio proceso de almacenaje, con una presencia clave de la programación y de las nuevas tecnologías”, explica Mikel Ormazábal, responsable de Procesos Motores, Montaje y Revisión Final en Volkswagen Navarra.
Por su parte, Víctor Irízar, gerente de Montaje en Volkswagen Navarra, considera que con este nuevo almacén “la fábrica aumenta su capacidad de adaptación ante variaciones tanto en circunstancias puntuales de la producción, como ante diferentes características de los vehículos a fabricar”. Esta ventaja, explica Irízar, “nos permite adaptarnos de una manera mucho más eficiente a las necesidades del mercado, mediante la mejora en el concepto de producción estable”.