Fue un anuncio imprevisto, estructural y de calado, que el Gobierno de Navarra no había dejado entrever hasta ahora. Este martes, el consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos, José María Aierdi, reveló en comisión parlamentaria que el Ejecutivo foral convertirá en indefinida la calificación de las futuras VPO.
El objetivo, según explicó, es evitar que estas viviendas se conviertan en libres pasado el plazo marcado por la normativa y, entonces, se puedan vender o alquilar a un precio arbitrario. En estos momentos, la calificación de las viviendas protegidas en régimen de propiedad y de arrendamiento con opción de compra tiene un período de vigencia de 30 años, aunque la Ley Foral 8/2004, de 24 de junio, de Protección Pública a la Vivienda de Navarra establece algunas excepciones para descalificaciones anticipadas. Y en las destinadas a alquiler, esa duración es de 20 años para las VPO y de 15 para otros tipos de viviendas protegidas.
“La vivienda protegida debe serlo durante toda su vida útil y no estar al albur de los vaivenes del mercado”.
Así sucede con las 392 VPO para alquiler de Testa, sociedad vinculada al fondo buitre Blackstone, construidas a finales de los años noventa en la Rochapea, San Jorge, Echavacoiz y Buztintxuri. Los propietarios tenían ya vía libre para fijar los precios de los alquileres al haber concluido la protección. Pero, finalmente, el Ejecutivo navarro alcanzó un acuerdo para mantener el régimen protegido, con una subida media de 60 euros mensuales, y hasta la fecha “no ha habido ningún desahucio”. Los precios no superarán los 565, 600 o 650 euros.
La medida para convertir la calificación de las VPO en indefinida aún no se ha aprobado, pero sí consta en el borrador que modificará la Ley Foral de Ordenación del Territorio y Urbanismo (LFOTU). Ahora bien, fuentes oficiales del departamento de Aierdi matizaron después, a preguntas de este medio, que la iniciativa no se aplicará con efecto retroactivo a las VPO antiguas, sino a las viviendas que obtengan esta calificación una vez entre en vigor la nueva normativa.
Aierdi, que compareció a petición de Navarra Suma, precisó que el precio de venta de las VPO será por tanto el que marquen las autoridades para evitar “la especulación” de particulares y promotoras, y la posible intervención de fondos buitre, “como está ocurriendo ahora”. “La vivienda protegida debe serlo durante toda su vida útil y no estar al albur de los vaivenes del mercado”, remarcó.
CASI MIL DESCALIFICACIONES
En este sentido, indicó que en Navarra ya se han contabilizado 983 calificaciones de VPO vencidas, 829 de ellas pertenecientes a viviendas privadas y 153, a inmuebles públicos: “El problema es el desamparo en el que se encuentran cientos de familias, que ven cómo de repente las viviendas han pasado a ser libres. Así, quedan en manos de fondos de inversión, que quieren rentabilizar el negocio y les exigen arrendamientos a precio de mercado, llegando a cuadriplicar lo que pagaban en régimen protegido. Nos hemos visto obligados a intervenir”.
“Cientos de familias quedan en manos de fondos de inversión, que les exigen arrendamientos a precio de mercado”.
El consejero ensalzó el nuevo modelo que ha implementado el Gobierno de Navarra. Un sistema en el que el Ejecutivo foral está impulsando promociones públicas de alquiler. “Hemos pasado de promover cero viviendas de alquiler entre 2011 y 2015 a las 524 ya puestas en marcha”, detalló.
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