Tafinox, cooperativa de Tafalla especializada en la fabricación a medida de muebles de acero inoxidable, ha convertido la internacionalización en una de sus principales fortalezas. Desde sus inicios, apostó por fomentar las exportaciones indirectas, que en el último año han crecido un 20 % hasta suponer “entre el 40 % y el 50 %” de su facturación. Hoy, la compañía comercializa sus productos en distintos países, entre los que figuran destinos tan poco comunes para las empresas navarras como Haití y Arabia Saudí, a los que se suman otros donde operó anteriormente como Cuba.
Su responsable de Gestión, Diego González, trabaja con el objetivo de incrementar un 25 % la facturación, que a su vez se ha duplicado en los últimos diez años. Un hito que ve factible dado el crecimiento que ha experimentado su cartera de clientes. “Saben valorar la calidad de nuestro trabajo””, defiende González.
En estos momentos, el 70 % de los ingresos proceden del sector sanitario. Pero la empresa también quiere explorar nuevas oportunidades de negocio y producto en otros ámbitos: “El acero inoxidable está presente en casi todos los sectores, como en la construcción”. De ahí que haya invertido en maquinaria y esté rediseñando su marca.
EL RELEVO
Este año, la cooperativa se encuentra inmersa en un proceso de cambio. Una nueva generación, de la que González forma parte, ha tomado las riendas de una compañía que nació en Bélgica con otra denominación: Inoxybel.
La firma se implantó en Tafalla en 1966. Con el tiempo, formó Inoxybel España y dejó el mercado del acero estandarizado para comenzar a ofrecer productos especializados. “No se podía competir en el antiguo mercado, ya que había muchas empresas con gran maquinaria. Por eso optamos por esta vía”, rememora el responsable de Gestión.
En 2012, la empresa vivió una grave crisis económica, que derivó en un concurso de acreedores. A raíz de aquel proceso, los trabajadores formaron una cooperativa y compraron la compañía, que en 2013 pasó a llamarse Tafinox.
