Óscar García Valdivieso, miembro de Ner Group, ofreció ayer una conferencia sobre un nuevo modelo de colaboración entre diferentes para generar más riqueza, crecimiento y empleo. Una jornada que ha sido organizada por la Asociación Navarra de Empresas Laborales (ANEL) y la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN).
Bajo el título “Nuevo Estilo de Relaciones. Una forma diferentes de gestionar las organizaciones empresariales”, García Valdivieso explicó que la economía española compite, a día de hoy, con países cuyos costes laborales son considerablemente inferiores a los nuestros, disponen de dinero para comprar maquinaria y cuentan con más apoyos gubernamentales. Por tanto, “hoy lo que diferencia a una empresa de otra no es la calidad, sino el servicio”.
PERSONAS Y EQUIPOS
Conscientes de ello, en Ner Group han desarrollado un sistema “basado en las personas, proyectos y orientado a clientes, en un entorno social”. Se buscan personas creativas, porque “de la creatividad logramos la capacidad emprendedora, y así podemos innovar”. Para eso, afirmó García Valdivieso, “necesitamos una sociedad, una educación y unas organizaciones donde la confianza, la libertad permita que surjan personas I+I+I, es decir, inquietas, inconformistas, iconoclastas”. En este sentido, lamentó que en la actual sociedad “se tache de contestón al que protesta” y se pregunta, «¿con los que callan vamos a competir en el mercado global?”. Se necesitan “personas que sientan, porque primero se siente, luego se piensa y, luego, se hace”.
De esta forma, explicó García Valdivieso, “tratamos de sacar lo máximo de las personas” dentro de un modelo de organización fundamentado en el trabajo en equipo. “Son equipos auto-gestionados, en un caos organizado, sin ningún jefe, solo hay equipos”. Son los equipos, por tanto, los que marcan los objetivos y los que eligen quién es su líder y qué papel debe jugar. Las decisiones se toman convenciendo, no imponiendo.
COMPROMISO
Esta forma de trabajar obliga a los empleados a “llegar a acuerdos” en las asambleas, en las que clientes y proveedores también están representados. Ahí es donde se toman las decisiones: “una persona, un voto; sin sindicatos, porque nadie representa a nadie”. Las discusiones suelen ser frecuentes, pero también es grande el compromiso que adquieren los trabajadores con los objetivos. Unos dependen de otros, de tal forma que si uno no cumple sus objetivos, el resto se ve afectado y se generan tensiones necesarias para salir adelante.
En la organización tradicional, la jerárquica, “al trabajador le da igual que se cumplan o no los objetivos, porque entiende que el problema es del jefe”. A veces, afirmó García Valdivieso, “nos olvidamos de que el que paga nuestras nóminas no es el jefe, es el cliente y hasta que no eres consciente de eso, no cambias”.
Esta nueva situación implica, por otra parte, tres conceptos clave: transparencia, confianza y generosidad. “Si queremos que la gente se implique, tienen que creer, para creer debe haber confianza y eso se gana con la transparencia; si siembras transparencia, la gente responde”. Por eso, toda la información es pública, incluso, la cuenta de resultados. “Nosotros dedicamos mucho a explicar la cuenta de resultados” y demás conceptos económicos, para hacerlos comprender. La transparencia es total y las debilidades salen a la luz.
En la consecución de los acuerdos alcanzados, todas las partes implicadas deben ser generosos, “anteponer el bien común al bien individual”. Por eso, “nosotros repartimos el 30% del beneficio entre todos” y “reducimos todos los niveles salariales a 4, entre el que más gana y el que menos gana hay una diferencia de 2,10%”, afirmó García Valdivieso.
PERTENENCIA
Con todo esto se logra “enganchar y emocionar” al trabajador y “si consigues que la gente se emocione, logras un proyecto común y un éxito compartido”, concluyó García Valdivieso.
Para aplicar este novedoso sistema es fundamental, eso sí, «estar convencido» de lo que se está haciendo y que haya personas, porque «si hay personas, se puede aplicar«. Los resultados les avalan, porque Ner Group ha logrado en 2013 aumentar un 13% las ventas de las empresas que ha atendido, con respecto al ejercicio anterior. Un crecimiento que en términos de beneficios obtenidos asciende a un 172%.