«Hoy, Pamplona pierde una oportunidad de hacer un mejor proyecto en Beloso». Con estas palabras, la alcaldesa de la capital navarra, Cristina Ibarrola, comenzó la rueda de prensa convocada de urgencia este miércoles junto al concejal especial de Desarrollo Sostenible y Proyectos Estratégicos, Aitor Silgado, para revelar que el Ayuntamiento licitará finalmente el proyecto original del carril bici y corredor peatonal entre la ciudad y Burlada.
El anuncio llega después del ultimátum lanzado por el Gobierno de Navarra, que suscribió el correspondiente convenio en abril con Pamplona y Burlada para acometer un proyecto que, según el Consistorio, conllevará la tala de unos 350 árboles. Ese fue el motivo que llevó al equipo de Ibarrola a suspender la licitación el pasado 25 de septiembre con el fin de diseñar una modificación «con menor impacto ambiental». La iniciativa cuenta con un presupuesto de 4.744.312,38 euros, financiados por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, a través de los fondos europeos Next Generation EU.
El ultimátum del Ejecutivo foral expiraba este viernes, 13 de octubre. Y dado que las alternativas planteadas por el Ayuntamiento de Pamplona no han recibido su respaldo, el Consistorio ha aceptado retomar la propuesta inicial acordada. «Desde que llegamos al gobierno municipal en junio, hemos intentado modificar este proyecto de forma constante porque, al analizar técnicamente sus implicaciones, consideramos que había opciones medioambientales mejores, simple y llanamente (…) Nosotros no hemos querido nunca romper este convenio, que sigue vigente. Nuestro objetivo de hacer el proyecto original más sostenible nunca ha implicado la ruptura del convenio», defendió la primera edil, quien añadió que «fueron los técnicos» quienes cifraron en unos 350 los árboles afectados. «Ese número no sale de invención alguna», remarcó.
«Nunca se iba a perder el dinero de Europa porque este Ayuntamiento siempre ha apostado por hacer el proyecto»
A partir del inicio de su mandato, su equipo buscó nuevas fórmulas que «salvasen la mayoría de los árboles» y permitiesen «hacer realidad tanto el carril bici como el corredor peatonal». «Esa era la manera de hacer un corredor verdaderamente sostenible», incidió.
En este sentido, la alcaldesa detalló que el Ayuntamiento de Pamplona ha presentado «dos buenas alternativas que mejoraban el proyecto inicial». La primera «fue rechazada por el Gobierno de Navarra» porque «cambiaba el ámbito de actuación» previsto inicialmente. Un motivo que, según ella, «se solventó con un segundo proyecto que respetaba esta premisa». «Hemos dado todos los pasos manteniendo un estrecho contacto con el Gobierno de Navarra. Lo hemos intentado por todos los cauces posibles y de todas las maneras que hemos podido», enfatizó.
Ibarrola hizo hincapié en que su equipo «siempre ha tenido el compromiso» de llegar en plazo para licitar el proyecto, con una propuesta que generara «más garantías de no perder los fondos europeos». «Este martes, el Ayuntamiento recibió un ultimátum en el que se cerraba cualquier espacio a crear un proyecto mejor a riesgo de que se retire la financiación. Y, ante una misiva de estas características, el Ayuntamiento no puede hacer otra cosa que ser ejecutivo y afrontar esta realidad. Pamplona va a tener un nuevo carril bici y un corredor peatonal, pero hoy pierde la oportunidad de hacerlo realidad con un proyecto mejor», esgrimió.
EL PROCESO
Así, este miércoles de publicará un anuncio previo en el portal de contratación de Navarra para indicar que se vuelve a licitar el proyecto. El lunes se enviará el pliego a Intervención del Consistorio y del Gobierno foral y, el miércoles, se aprobará la licitación y se abrirá el plazo de presentación de ofertas. «No nos han permitido hacer un proyecto mejor», repitió una vez más.
No obstante, las empresas que concurran a la licitación podrán proponer mejoras medioambientales
El pliego será el mismo que se licitó inicialmente. Ahora bien, en los criterios de valoración se añadirán mejoras medioambientales que las empresas «puedan proponer». Su objetivo es «paliar de alguna manera los daños medioambientales previstos».
Además, llevará al pleno una modificación presupuestaria para «trasplantar el mayor número posible de árboles» talados. «Esperamos que la mayoría municipal apruebe esta propuesta», remató para precisar acto seguido que «nunca se iba a perder el dinero de Europa porque este Ayuntamiento siempre ha apostado por hacer el proyecto».
