Miembros de las secciones sindicales de UGT, CCOO y CGC han llegado a un acuerdo con la dirección de Volkswagen Navarra, que han calificado como “definitivo” para conseguir traer la producción del ansiado segundo modelo a la factoría de Landaben a partir de 2018.
Los principales escollos que impedían el pacto han quedado relegados, según las explicaciones realizadas desde las organizaciones sindicales. Así, por ejemplo, en el tema salarial, se establece una subida desde el año del lanzamiento del nuevo modelo (2018) del 50 por ciento del IPC al tiempo que se consolidarán las tablas salariales al 100 por cien en años sucesivos.
Según la representación de los trabajadores, el acuerdo recoge “sus principales planteamientos”.
Por su parte, en cuanto a competitividad, se fija la jornada laboral en 216 días y una producción de 1.408 vehículos diarios, al tiempo que los sindicatos asumen los compromisos que la dirección les había solicitado en cuanto a lucha contra el absentismo y cumplimiento de los objetivos de productividad.
De este modo, gracias al acuerdo alcanzado las partes confían en reforzar un plan industrial para Volkswagen Navarra con un horizonte temporal futuro de 15 años, por lo menos, hasta situarse por encima del 2031. Cabe recordar que, al margen de esos planes, la factoría de Landaben se mantendrá como el principal centro productor del modelo Polo, extremo que ha quedado al margen de cualquier negociación ya que fue un punto coincidente por todos desde el inicio de las negociaciones.
A partir de aquí, se ha cumplido una de las dos condiciones que pedía la matriz para la concesión del segundo modelo. En concreto, Volsburg, que debiera tomar una decisión al respecto la semana que viene, siempre solicitó un documento común como el suscrito hoy por los miembros de la dirección y los sindicatos de Landaben.
Si se cumple la segunda condición, es decir, si se acepta la propuesta que hoy ha quedado negro sobre blanco y llega a VW Navarra el segundo modelo a partir de 2018 se podrían generar entre 300 y 500 empleos directos, según las estimaciones realizadas estos últimos días y de las que se ha hecho eco Navarra Capital (ver noticia aquí).
No obstante, estos acuerdos podrían quedar sin efecto si finalmente no se adjudica a VW Navarra la fabricación del segundo modelo y, por el contrario, si el mismo se asigna a Pamplona estos puntos se entenderán acordados para el próximo convenio colectivo.
Desde los sindicatos, en todo caso, destacan que, si la empresa muestra un compromiso “claro, expreso y nítido” de realizar inmediatamente 50 contrataciones fijas y posteriormente las necesarias mes a mes, firmarán este acuerdo, que consideran “histórico”.
Representantes de UGT, CCOO y CGC afirman, además, ser conscientes “del reto y la oportunidad que se nos brinda“, por lo que “bajo ningún concepto” van a desaprovecharla, “más si cabe tras las informaciones aportadas por la dirección en relación a las consecuencias de quedarnos con un solo modelo o fabricar dos”.