‘Alcanzar’ las inaccesibles estrellas es un sueño que se puede cumplir en el valle del Roncal, lugar que gracias a su cielo estrellado ha obtenido la certificación ‘Destino Turístico Starlight’. Tomás Pasquel, presidente de la Junta General del Valle del Roncal, ha recibido este reconocimiento en la feria de turismo FITUR (celebrada en enero de 2018), de manos de la ‘Fundación Starlight’, que premia los lugares idóneos para la contemplación de las estrellas, experiencia única en la que ciencia y diversión se fusionan.
El diploma, entregado por el director de la Fundación Luis Martínez, acredita al valle como uno de los mejores lugares del Pirineo para ver las estrellas y certifica la existencia de un recurso que puede ser explotado turísticamente de forma sostenible. Esta condición de espacio de especial valor natural implica también el desarrollo de estrategias de alumbrado nocturno más adecuadas llegando hasta el más mínimo detalle: las luces led deben ser de color ámbar (en lugar de blancas).
PIRINEOS LA NUIT
La historia comenzó en 2017 cuando se puso en marcha el proyecto transfronterizo ‘Pirineos La Nuit’, fruto de la colaboración de diferentes instituciones, con el objetivo de proteger y mejorar la calidad del medio nocturno, en relación a la oscuridad natural de la noche en los Pirineos. El Planetario de Pamplona junto al valle del Roncal, el Parc Astronòmic del Montsec (Lleida) y el Pic du Midi de Bigorre (Altos Pirineos franceses) son los actores implicados.
Pero este proyecto nace realmente en 2016, cuando el Planetario de Pamplona entra en contacto con el valle de Roncal para que soliciten la certificación Starlight, “y la acogida desde el principio fue fantástica”, explica Fernando Jáuregui, astrofísico del Planetario.
Jáuregui lo tiene claro: “Para que la gente valore la importancia de la oscuridad de la noche la tiene que poder disfrutar y una manera de hacerlo es contemplar las estrellas”, asegura. “Poner en valor la oscuridad natural de la noche, divulgarla y elaborar un plan de mejora para mantener la oscuridad de la noche pirenaica” son los tres objetivos de un proyecto financiado por Fondos Europeos INTERREG/POCTEFA.
En este contexto, la certificación consolida la “tercera pata” de ‘Pirineos La Nuit’: “dotar de estas áreas de un reconocimiento internacional que acredite el cielo estrellado y propicie la generación de un turismo que lo ponga en valor”, indica Fernando Jáuregui. Y el resultado es importante, ya que ha logrado captar la atención de un “turismo que fluye, de calidad, con sensibilidad por el medio ambiente, familiar… que suponen un incentivo para el desarrollo sostenible del valle”, concluye.
Por su parte, la ‘Fundación Starlight’ es una entidad creada por el Instituto de Astrofísica de Canarias que “acredita aquellos espacios que poseen una excelente calidad de cielo y que representan un ejemplo de protección y conservación. Son escenarios que incorporan la observación del firmamento como parte de su patrimonio natural, paisajístico, cultural o científico y fomentan a su vez el ‘Turismo de las Estrellas’”. Este sistema de certificación cuenta con el respaldo de la UNESCO, la Organización Mundial del Turismo y la Unión Astronómica Internacional.
Pero este proyecto es más ambicioso y ya están trabajando para lograr el siguiente objetivo: conseguir el reconocimiento de ‘International Dark-Sky Association’.
CALENDARIO
Aunque cualquier noche estrellada se presta a la contemplación, a quienes les seduzca acercarse a disfrutar de esta gran experiencia, es importante prestar atención al calendario de los fenómenos astronómicos que tendrán lugar a lo largo de 2018. Disfrutemos de un momento único que nos provocará efectos psicológicos positivos y bienestar, estimulando incluso nuestra creatividad.
- Superluna, fenómeno que se produce cuando coincide la luna llena con el máximo acercamiento de esta a la Tierra: 31 de enero.
- Eclipse solar parcial: 15 de febrero.
- Luna azul o segunda luna llena ocurrida en un mismo mes: 2 y 31 de marzo.
- Líridas o lluvia de meteoros (estrellas) de actividad moderada: 16 a 25 de abril, a partir de medianoche.
- Lágrimas de Halley o lluvia intensa de las estelas Eta Acuáridas, los restos del famoso cometa Halley: 6 y 7 de mayo.
- Luna roja o ‘de sangre’, justo cuando sale la luna y se pone el sol: julio.
- Perseidas o lluvia de estrellas de actividad alta, popularmente conocidas como las lágrimas de San Lorenzo: 12 y 13 de agosto.
- Oriónidas o lluvia de estrellas de actividad moderada que proceden del Halley: 2 de octubre.
- Leónidas o lluvia de estrellas y rayos verdes que se produce cada 33 años: 17 y 18 de noviembre
- Gemínidas o lluvia de estrellas de actividad alta: 7 y 17 de diciembre.
Solo queda una recomendación: una buena manta y un termo con una bebida caliente para evitar que el frío de la noche, incluso en agosto, nos impida disfrutar del titilar de las estrellas más brillantes. Y le añadimos la ‘magia’ de saber que algunas de las estrellas que podemos apreciar hoy, en realidad pudieron haberse desintegrado hace miles de años.