Una información facilitada por José María Cambra para Navarra Capital
Un incendio, declarado en la madrugada del jueves al viernes, ha dejado prácticamente inservible el centro de producción que una de las fábricas que INDUSAL, grupo de empresas, a nivel nacional, dedicadas a proporcionar un sistema integral de alquiler y lavado de ropa, posee en el municipio de Marcilla y en el que se emplean más de un centenar de personas. El siniestro, en concreto ha afectado de lleno a la factoría salvo su zona de almacén y oficinas quedando muy dañada la estructura metálica y la cubierta hasta el extremo que no se descarta su demolición.
El alcalde de Marcilla, Mario Fabo, explica el origen de este siniestro que ha supuesto “un duro mazazo” para las expectativas de una compañía, INDUSAL, que precisamente manejaba hasta hace poco la idea de ampliar sus instalaciones en esta localidad navarra.
El Centro de Gestión de Emergencias del 112-SOS Navarra ha movilizado unidades de los parques de bomberos de Peralta, Lodosa, Tafalla y Central (Cordovilla), que al llegar han comprobado que se trataba de un incendio generalizado de grandes proporciones que afectaba principalmente a la nave central. Una vez sofocado, el vicepresidente de Desarrollo Económico del Gobierno de Navarra, Manu Ayerdi, se ha trasladado a Marcilla para conocer de primera mano lo sucedido y valorar posibles líneas de apoyo que garanticen la viabilidad de la empresa y su idea de negocio
Esa misma esperanza en encontrar una línea de trabajo coordinada entre las distintas administraciones es la que ha mostrado el alcalde de Marcilla, Mario Fabo
INDUSAL representa para Marcilla una importante fuente de ingresos así como de empleo, tal y como recordaba su primer edil.
Hasta que se evalúen definitivamente los daños y se planteen las posibles alternativas de futuro, los responsables de la empresa dañada por el siniestro han decidido continuar su tarea y, por ello han anunciado que derivarán ahora parte de su trabajo, fundamentalmente las ropas del Servicio Navarro de Salud a sus plantas de Bilbao y Nájera, en La Rioja.
