3D Modular nació por la inquietud personal y las ganas de emprender en el sector de la construcción industrializada de Sergio Pemán y sus socios, José Lavilla y David Fuertes. Un área de la que Pemán, arquitecto técnico de formación y responsable de Operaciones en la empresa, se considera “un enamorado” y a la que, “hace ya varios años” y gracias a un antiguo jefe, vio una gran proyección.
Así empezó a gestarse el nacimiento de la compañía. Tras varios años apostando por su sueño y “haciendo trabajo de hormiguita”, como dice Pemán, 3D Modular se creó en los albores de la pandemia. Una firma que suma tres años de andadura y que ahora comienza a llevar a cabo su primer proyecto internacional, concretamente en Alemania.
“En 2004 o 2005, ya empezamos a hacer cosas que en aquel momento eran totalmente desconocidas”
“En 2004 o 2005, ya empezamos a hacer cosas que en aquel momento eran totalmente desconocidas. Podríamos haber sido punta de lanza, pero llegó la crisis de 2008 y se licuó todo aquel espíritu. Seguimos trabajando y aprendiendo hasta que llegó un momento en el que surgieron otras coyunturas y otros problemas, de modo que por inquietud personal buscamos una seguridad en nuestro trabajo. De ahí surgió 3D Modular”, cuenta Pemán a Navarra Capital.
La empresa echó a andar después de que Pemán y sus dos socios abandonaran su anterior empresa, donde ya trabajaban en la construcción industrializada, para apostar por un tren que “estaba a punto de pasar o ya estaba pasando”. Los tres se mostraban convencidos de encontrarse ante una oportunidad única, que ya estaba teniendo un gran éxito en otros países. Y el tiempo parece darles la razón: “Hoy, el concepto de la construcción industrializada se ha multiplicado enormemente y se ha posicionado mucho mejor”.
El principal problema al que se enfrentaban era aterrizar en un sector todavía en desarrollo y cuyas empresas líderes ya habían dado grandes pasos. “A veces llego a casa y pienso ‘relájate, estás corriendo mucho’. Pero quienes están en la punta de ese tren corren mucho. Y nosotros, que llevamos inquietos mucho tiempo y les vemos pasar, queremos quedarnos en ese tren al menos en el tercer vagón”, asegura.
“Hoy, el concepto de la construcción industrializada se ha multiplicado enormemente y se ha posicionado mucho mejor”
Pemán y sus socios no contaban con que, en marzo de 2020, poco después de abandonar su anterior empresa, llegaría la pandemia. No les quedó otra opción que trabajar desde casa, pero el Covid-19 no les impidió comenzar con sus primeras construcciones en junio de ese mismo año.
“Tuvimos que adaptarnos como pudimos para poder salir adelante durante el confinamiento. Yo iba gestionando o comprometiendo el personal durante el primer mes o mes y medio de la pandemia. Y claro, en aquellos momentos la gente estaba como para escucharte (…). Pero, por suerte, buena parte de quienes comenzaron a trabajar con nosotros pertenecían a nuestra anterior empresa y decidieron sumarse porque confiaban en nosotros y en este proyecto”, evoca.
Poco a poco, y aunque el mundo pareció detenerse, surgieron nuevas necesidades y oportunidades en torno a su sector. De hecho, la producción aumentó en gran medida porque las empresas, y especialmente las administraciones públicas, “empezaron a ver que se podía construir de otra manera”. En concreto, estas últimas “comenzaron a demandar mucha construcción modular para cubrir temas sanitarios”, lo que supuso un espaldarazo para la firma.
Por eso, Pemán destaca que su sector “se vio beneficiado por la pandemia”, y asevera que “quien diga lo contrario está mintiendo”. Eso sí, él y sus socios también tuvieron que “pelear” por la escasez y el alza de precios de las materias primas.
Casi tres años después, 3D Modular se ha consolidado con una línea de trabajo más centrada en la construcción industrializada de servicios. Un producto “más abrigado, con unas formas, una estética y un equipamiento mayor”. Porque, según Pemán, la vivienda modular “exige mucho más” de lo que pueden afrontar con su “concepto humilde de empresa”.
UN DESARROLLO FUERA DE LO NORMAL
3D Modular ha vivido un crecimiento “especialmente rápido”, no un arranque “al uso”, ya que ha tenido “el viento a favor”. Ahora, sus tres socios se plantean mudarse a una nave más amplia. Y aunque la firma comenzó su actividad con cinco personas, su equipo ya está formado por once. Una estructura “humilde”, a la que se suman otras empresas y servicios subcontratados, y que Pemán compara con “un equipo de fútbol al que se incorporan reservas”.
Aunque la firma comenzó su actividad con cinco personas, el equipo ya está formado por once
“Nuestro recorrido ha sido una montaña rusa. No hemos tenido paz para comparar bien nuestras cuentas con un año estándar. Siempre van a existir coyunturas, pero no tan grandes como las que hemos vivido estos años”, explica al hacer un repaso al recorrido de esta compañía que, en casi tres años de facturación, ha ido creciendo de 10 en 10 % anual.
2020 fue un “muy buen año”, incluso teniendo en cuenta que su actividad comenzó en junio, aunque sus márgenes se redujeron entre ese ejercicio y 2021 debido al repunte de los precios de las materias primas. Pero la empresa está “superando ese muro” y, en 2022, “la subida se estabilizó”.
LA AVENTURA EN EL EXTRANJERO
Hasta ahora, los esfuerzos de la compañía se han centrado en todo el territorio español, especialmente en Asturias, y en el sur de Francia. Navarra, “una de las potencias nacionales” del sector, concentra una parte muy pequeña de su actividad.
Aunque el tamaño de la compañía todavía “no permite” acometer un plan de internacionalización ambicioso, ya que ese tipo de operaciones “exige una logística mucho más potente”, 3D Modular sí está abriéndose camino en el extranjero. En Alemania, por ejemplo, la empresa española Moncobra les ha encargado un primer proyecto de integración.
“Es muy complicado llegar a esos países cuando ya tienen su propia estructura de construcción industrializada y que, además, es muy potente (…). Ahora bien, esta oportunidad puede abrir una ventana y oye… Siempre habíamos tenido la idea de exportar a países en desarrollo, pero no habíamos pensado apenas en la exportación de valor a países desarrollados, con más recursos económicos”, valora el responsable de Operaciones de 3D Modular.
Entra aquí para leer más sobre la construcción en Navarra.