“Inventen, pues, ellos y nosotros nos aprovecharemos de sus invenciones. Pues confío y espero en que estarás convencido, como yo lo estoy, de que la luz eléctrica alumbra aquí tan bien como allí donde se inventó”, escribió en un ensayo Miguel de Unamuno en 1906.
Más de un siglo después de no hace falta ser un gran analista para darse cuenta de lo equivocado de esta afirmación, puesto que aquellas sociedades que invierten más en innovación son las que están liderando las economías del mundo. La innovación es un sinónimo de progreso económico y social.
La innovación requiere de unas condiciones previas, y una de ellas es la llamada sociedad del conocimiento. Esto no es algo nuevo. Europa se convirtió en el continente preponderante durante siglos, gracias sin duda alguna a la invención, entre otras, de la imprenta. Esta herramienta no hizo sino acelerar y abaratar el coste de la difusión del conocimiento, gracias al cual, se podían producir intercambios de ideas.
Ello dio lugar a grandes progresos, como la creación de las primeras enciclopedias o de las primeras sociedades de ciencias en Inglaterra. Sin duda, todo ello sentó las bases a la revolución industrial, y no hace falta seguir contando lo que ha sucedido en los últimos tres siglos. En resumen, uno de los pilares del progreso ha sido el intercambio y difusión del conocimiento, acompañado de una necesidad imperiosa de asumir una mentalidad abierta al exterior.
ALGUNAS CIFRAS IMPORTANTES
La UE adoptó la Estrategia Europa 2020, que trajo consigo la adopción de la Innovation Union. La política de innovación en la UE cuenta con más de 30 carpetas, con sus respectivos planes de acción, entre las que figuran la digitalización, ecoinnovación, transferencia de conocimiento o especialización inteligente, entre otras michas.
Horizonte2020 es el programa más conocido, pero sólo la política de I+D de la UE ocupa más de 30 carpetas con sus respectivos planes de acción.
La herramienta financiera más conocida para desarrollar dichas políticas es el instrumento Horizonte 2020, el mayor programa de ayudas multinacional en materia de innovación del mundo. En este sentido, la UE también ha desarrollado los llamados “Partenariados de Innovación”. Existen partenariados público-privados, y otros público-públicos.
Dentro de los primeros encontramos diversas iniciativas como las European Technology Platforms (ETP, que cuenta con 38 iniciativas concretas en energía, medio ambiente…), Joint Technology Iniciatives (JTI, con 7 iniciativas concretas en salud, electrónica…), European Innovation Partnerships (EIP, cinco plataformas, en temas como Smart cities, agua…), Knowledge and Innovation Communities (KIC, digitalización, clima, agroalimentación…) y un largo etc. Una larga lista que alcanza las casi 200 iniciativas diferentes, cada una de ellas con su estructura propia.
Además de la política de innovación, la UE dedica gran parte de sus recursos (cerca de 400.000 millones de €) a la política regional. Ésta tiene por objetivo conseguir una mayor cohesión entre las regiones de Europa, así como mejorar su capacidad innovadora. Relativamente homogenizada mediante la introducción de unos objetivos temáticos comunes, cada Estado Miembro, y cada región deben establecer sus estrategias de implementación de dichos fondos llamados “estructurales”. La especialización inteligente aparece aquí como un gran catalizador de las estrategias regionales con miras a poder fomentar una mayor cooperación e integración entre las políticas de innovación y de crecimiento de las regiones.
FRENTE A IGNORANCIA, CONOCIMIENTO
En resumen, Bruselas es un gran hervidero de ideas e intercambio de prácticas y conocimiento. Es obligación de la Delegación del Gobierno en Bruselas hacer seguimiento y transmitir de una manera ordenada y eficiente de las iniciativas que acabamos describir (y sólo se ha mencionado la punta del iceberg). Para ello se han creado los Foros de Encuentro Permanentes, donde se va a canalizar la información relativa a los cuatro sectores identificados en nuestra especialización inteligente (mecatrónica, agroalimentación, renovables y salud) que procede de la UE.
Además de información, los Foros incluirán newsletter y, al menos, dos encuentros anuales por cada sector “dinámicos y atractivos”.
La ignorancia, la desidia y falta de coordinación nunca han hecho próspera a una sociedad. Resulta evidente la importancia que tiene hacer seguimiento o participar en plataformas europeas donde se concentran los mayores y más punteros centros tecnológicos e industria de Europa.
El conocimiento y difusión de las iniciativas de la UE es un requisito indispensable para que Navarra pueda desarrollar una necesaria estrategia coordinada de acción europea entre todos los departamentos y organismos públicos, y poder convertirse así en un líder innovador. Es objetivo de los Foros Permanentes de Encuentro aportar su grano de arena a contribuir a este objetivo compartido. Más información en este enlace.
Mikel Irujo
Delegado del Gobierno de Navarra en Bruselas
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