El presidente de la Asociación para el desarrollo de la Empresa Familiar de Navarra, ADEFAN, Pachi Esparza, ha asegurado esta tarde ante los miembros de la Asamblea General de esta organización, reunida en el hotel Tres Reyes de la capital navarra que el proyecto de reforma fiscal planteado por el Gobierno de Navarra «es un ataque» contra la empresa familiar y sus propietarios.
Esparza, asimismo, cree que el cambio impositivo impulsado por el Ejecutivo foral «deshace los éxitos conseguidos con el anterior Gobierno, pone a los contribuyentes navarros contra las cuerdas, en una situación precaria» y, añade, «es un agravio comparativo con otras regiones más próximas». Por este motivo, el presidente de ADEFAN ha confirmado que su intención es denunciar desde esta entidad el proyecto planteado por el Gobierno para cambiarlo por otro que sea menos lesivo.
Las declaraciones del máximo responsable de la Asociación para el desarrollo de la Empresa Familiar de Navarra se han producido al inicio del extenso programa de actividades promovido por la citada organización para dar visibilidad y reivindicar la importancia de la empresa familiar en nuestra región. Un inicio en el que Pachi Esparza ha estado acompañado por la directora territorial de Caixabank en Navarra, Ana Díez Fontana.
El presidente de ADEFAN ha aprovechado su saludo inicial para destacar que, en un año, sus asociados se han incrementado hasta superar el centenar. De este modo, de acuerdo con los números facilitados por sus propios responsables, sus miembros, en su conjunto, ya representan el 15 por ciento del PIB regional, emplean a más de 8.000 personas y su facturación supera los 2.700 millones de euros al año. A partir de esos números y teniendo en cuenta que, como afirmó Esparza, «la empresa familiar ha sido definida por la Comisión Europea como un bien social que hay que cuidar y preservar puesto que constituye el pilar fundamental de la estructura económica de una región», ADEFAN se ha marcado varios objetivos para el nuevo año.
En primer lugar, constituirse en una entidad «útil y participativa» para lo que se plantea el desarrollo de diversos estudios y actividades de intercambio para lo que cuenta con el apoyo expreso del Instituto de Empresa Familiar como con otras asociaciones territoriales como las del País Vasco, Cantabria, Aragón o Madrid, por citar algunos ejemplos.
Por otro lado, dentro de esa línea estratégica de nuevos proyectos, sobresale el destinado a facilitar prácticas e intercambios que redunden en que las nuevas generaciones incrementen sus niveles de conocimiento y formación para dotarles de las capacidades que les habiliten para tomar el relevo dentro de estas organizaciones. En este campo se puso en marcha el pasado agosto diversas actividades, pioneras a nivel nacional, realizadas bajo el título «El Embrujo de Emprender» y que están encaminadas a compartir experiencias a partir de un caso de empresa familiar cuyos resultados fueron destacados por Pachi Esparza.
En su opinión, «han permitido a nuestros jóvenes conocer cómo es el desempeño y la convivencia así como el sacrificio, el esfuerzo y la dificultad que se producen dentro de una empresa familiar» por lo que confió en que, próximamente, este sistema se extienda al resto del país. Por este motivo, una vez conseguidos estos primeros resultados esperanzadores, el presidente de la Asociación para el desarrollo de la Empresa Familiar de Navarra exhortó a sus asociados a implicarse en esta serie de prácticas que calificó como «muy enriquecedoras».
Tras esta primera intervención, el resto del programa de actividades incluyó la celebración de dos mesas redondas de debate. La primera titulada «La Empresa Familiar, base de estabilidad y progreso» contó con la presencia de varios presidentes de las asociaciones territoriales de Empresas Familiares y, a la vez, directivos de reputadas compañías. Así, por ejemplo, cabe mencionar a Javier Ormazabal, de Velatia, en nombre del País Vasco; Francisco Esparza, de Unsáin, por parte de Navarra, Román Palacios de ELECTRA de Autol desde La Rioja, mientras que, como moderador actuó Fernando Cortés, director de Comunicación y Relaciones Institucionales del Instituto de Empresa Familiar.
El segundo de esos encuentros de debate se centró en los más jóvenes bajo el título de «Fórum Jóvenes. Cómo continuar con una empresa familiar y no morir en el intento». En él participaron integrantes de los Fórum de Jóvenes de las Asociaciones Territoriales de Empresa como, por ejemplo: Mónica Zarzuela, de Grupo Zarzuela, procedente de Castilla y León; Marta Beltrán, de AATT Madrid, de la citada comunidad autónoma; Álvaro Herrero, de Industrias Jacinto Herrero, de Cantabria y; Javier Ventura, de APM Prevención, en nombre de Navarra. Como moderadora la responsable fue Marta Beltrán, directora de la Asociación Territorial de Empresa Familiar de Madrid.
ARISTOCRAZY
El programa se completó, finalmente, con la intervención de Juan Suárez, heredero de la familia de joyeros Grupo Suárez y director creativo de Aristocrazy cuya reflexión llevó por título: “La joya de la familia”. En dicha exposición, Suárez contó la experiencia personal de la puesta en marcha de una starp up –Aristocrazy– dentro de un grupo familiar que sintió la necesidad de renovarse a partir de la crisis económica y de los importantes cambios del sector retail. En apenas 6 años, esta marca nueva ha abierto 83 tiendas en seis mercados distintos repartidos en Europa, EEUU y Latinoamérica y cuenta con 260 empleados.
El joven empresario describió cómo un equipo “multidisplinar” repensó el negocio aprovechando el know how de décadas, pero “mirando el futuro”. Mientras Joyería Suárez, la marca madre, elabora alta joyería y trabajan principalmente con oro y grandes piedras como diamantes, Aristocrazy incluye el concepto ‘moda’ en sus diseños. Crean sus piezas pensando en las tendencias de moda, lo que también les proporciona un aire más fresco y joven a sus productos.
El heredero del Grupo destacó la importancia de ser fiel a los “valores de de la compañía” pero adaptándose a las necesidades del mercado: “Queríamos crear experiencia de tienda, hacerla más cercana a una clientela nueva y salir de un nicho de mercado muy alto”. “Hasta que sacamos la marca Aristocrazy había mucha bisutería, pero nosotros queríamos sacar una línea de joyería a la que pudiera acceder más personas, fuera más accesible. El principal objetivo era sin duda, introducir la joya dentro del ámbito de compras de la mujer. Que toda mujer pudiera ir de compras y al igual que se compra un vestido o unos zapatos, incluyera la compra de estas joyas”, incidió Suárez.
El joyero acabó animando a los asistentes, en especial a los jóvenes sucesores de las empresas familiares, a apostar por la I+D+I e invertir en renovarse casi continuamente para no dejarse “arrollar por los grandes grupos”.
ENLACES VINCULADOS
Antes de la celebración de la Asamblea General de ADEFAN, su presidente Pachi Esparza estuvo invitado a nuestro programa de radio NAVARRA CAPITAL COPE. Escucha aquí su intervención.