Dos expertas en dimensión de género, colaboradoras de ADItech -agente coordinador del Sistema Navarro de I+D+i (SINAI)- se dieron cita la semana pasada con las personas participantes del proyecto estratégico Prometea para comenzar a incorporar la dimensión de género en dicho proyecto y contribuir así a su excelencia científica.
El proyecto, según indicó ADItech en un comunicado, tiene el objetivo de “reducir las complicaciones asociadas a las úlceras que se generan por presión en personas que permanecen largos periodos de tiempo inmovilizadas por su condición de salud”. Se trata de una iniciativa financiada por Gobierno de Navarra a través de la convocatoria de ayudas para realizar proyectos estratégicos de I+D entre 2022 y 2025.
El proyecto está coordinado por la empresa Biosasun y cuenta con la participación de la Asociación Allotarra de Agricultura y Ganadería Ecológica, Procgeri Gestión XXI (Domusvi), Eztitsu, Granja Escuela Ultzama, Tecnología Navarra de Nanoproductos (Tecnan), Lurederra, la Universidad Pública de Navarra (UPNA), el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA) y ADItech.
Precisamente ADItech es la entidad responsable de “contribuir a la excelencia científica a través de la incorporación de la dimensión de género”. Incorporar este enfoque “es una obligación legal, tal y como se indica en la ley Orgánica para la Igualdad, la ley de Ciencia y Tecnología y la ley Foral de Ciencia y Tecnología”.
El proyecto, financiado por el Gobierno de Navarra, está coordinado por la empresa Biosasun.
Para llevar a cabo estas tareas, cuenta con la colaboración de las expertas Olaya Fernández y Remedios Álvarez . Ambas pertenecen al grupo de investigación Igualdad y Género de la Universidad de La Rioja, creado en 2009. “Sus conocimientos -indicó ADItech en un comunicado- son complementarios de cara a poder introducir esta cuestión y evaluar su diseño metodológico en las diferentes tareas, así como de cara a apoyar y resolver cuestiones propias del análisis en base al sexo, género e interseccionalidad en cuestiones de salud propias del propio proyecto”.
Fernández es doctora en Filosofía por la Universidad de Salamanca. Actualmente es la investigadora principal del grupo de investigación Igualdad y Género de la Universidad de La Rioja. Álvarez es diplomada en Enfermería, experta en Metodología de la Investigación y doctora en Ciencias Humanas y Sociales por la Universidad de La Rioja. Actualmente también es profesora asociada en la Unidad Predepartamental de Enfermería de dicha institución universitaria.
SOBRE EL PROYECTO
Los procesos de envejecimiento cutáneo que afectan a la mayoría de las personas mayores “presentan una elevada prevalencia, combinándose con problemas circulatorios, con obstrucción principalmente de vasos periféricos (extremidades inferiores, zonas de presión en pacientes encamados etc.) e infecciones en presencia de un sistema inmune deficitario”. Esto “conlleva la aparición de enfermedades crónicas de muy difícil tratamiento, como la ateroesclerosis y las úlceras por presión”.
El difícil tratamiento de estas condiciones “se debe a la falta de irrigación y, por tanto, falta de aporte de nutrientes y oxígeno, combinada con la infección de las heridas y la dificultad de eliminar los microrganismos presentes”. En Europa, la incidencia de las úlceras por presión entre pacientes de población adulta “se sitúa entre el 5 % y 12 %, y tiende a aumentar hasta un 20 % en pacientes de geriatría con enfermedades agudas o crónicas, lo que supone que más de 10 millones de personas padecen úlceras por presión”. En este sentido, “se prevé que unos cuatro millones de pacientes con diabetes desarrollarán úlceras en las piernas en los próximos diez años”. Todo ello “representa un importante problema de salud pública, así como una elevada carga económica para los sistemas de salud”.
Por eso, el objetivo general del proyecto Prometea es lograr tratamientos combinados que permitan una regeneración de la piel a la par que controlen los procesos de infección e inflamación. Como resultado, se espera contar con los conocimientos y herramientas necesarias para desarrollar productos sanitarios y alimenticios.
