Las vacaciones de ANFAS son un programa que pertenece al área de ocio y cultura. Un espacio de encuentro donde se realizan actividades de tiempo libre con el fin de dar respuesta y contenido a la necesidades de descanso y diversión de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo. Para ello, además de un nutrido equipo profesional necesitamos de un numeroso grupo de personas voluntarias, que animan y les apoyan en las actividades teniendo como objetivo final el descanso, la diversión y el desarrollo personal. Este verano tenemos 270 personas con discapacidad intelectual o del desarrollo en nuestro programa de vacaciones para las que necesitaremos el apoyo de alrededor de 100 personas voluntarias. Comarruga, Orio, Fuenterrabía y Benicarló son los destinos que acogerán las 17 tandas organizadas por ANFAS en agosto, de una semana de duración cada una.
En Verano También, se enmarca en los programas del área de desarrollo infantil y juvenil, puesto que entendemos que la pérdida de rutinas y aprendizajes en niños y niñas con discapacidad intelectual o del desarrollo puede suponerles un retroceso en su evolución. Está dirigido a niños y niñas en edad escolar, entre los 3 y los 21 años, en situación de dependencia. Además del mantenimiento de habilidades, rutinas y aprendizajes, cumple también la función de facilitar la conciliación familiar. Esta actividad se lleva a cabo en los meses de julio y agosto en Pamplona, Tudela y Estella. El compromiso de las personas voluntarias es de lunes a viernes en horario de mañana apoyando a los niños y niñas en las diferentes actividades de interior y exterior que programa el equipo profesional. Tenemos prevista la presencia de más de 100 niños y niñas a lo largo de las distintas semanas que dura la actividad, una media de 15 o 20 por semana por lo que nos gustaría contar con unas 75 personas voluntarias en el programa.
Por último, el Albergue de ANFAS en Estella está abierto desde el mes de mayo y hasta finales de septiembre. Este espacio, en el que las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo ejercen de hospitaleros/as con los peregrinos y peregrinas del Camino de Santiago facilita el intercambio de experiencias y el conocimiento mutuo. Las personas voluntarias ejercen en el albergue como apoyo a las personas con discapacidad en sus labores de hospitaleros. Las personas voluntarias que quieran vivir esta experiencia pueden hacerlo de lunes a jueves o durante el fin de semana.
El voluntariado como transformador social
“Ganamos en comunidad” fue el lema elegido en el último congreso estatal de Plena Inclusión, federación a la que pertenece ANFAS, el año pasado. Con esta máxima, las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo reivindican la necesidad de avanzar hacia una inclusión total, vidas plenas vividas y disfrutadas en comunidad, recibiendo los apoyos necesarios para ser protagonistas de sus vidas.
Aunque en los más de 60 años que ANFAS lleva de andadura, los avances hacia la inclusión son evidentes, sigue haciendo falta una verdadera transformación para que la sociedad sepa ver y aceptar las capacidades y múltiples posibilidades de las personas con discapacidad. En este sentido, el voluntariado de nuestra asociación cumple este papel de transformador social. La persona voluntaria realiza aprendizajes sociales únicos: conoce la realidad de las personas a las que apoya, vive con ellas sus dificultades y progresos, intercambia opiniones, sentimientos, comparte su tiempo sin esperar contraprestaciones, facilitando, en última instancia, la relación entre iguales, la cercanía y la confianza.
Personas formadas
En ANFAS ofrecemos la formación necesaria para que las personas que acuden a realizar voluntariado en nuestra asociación puedan hacerlo de la mejor manera posible. La Escuela de Voluntariado es un espacio de formación organizado por ANFAS y dirigido a las personas voluntarias de la entidad. Los cursos son mayoritariamente presenciales, aunque se pueden hacer de forma telemática, gratuitos e impartidos por nuestros profesionales, especializados en cada materia. El objetivo es formar a nuestro voluntariado para dotarle de las competencias necesarias para llevar a cabo su labor de la mejor manera posible, en base a la misión, visión y valores de nuestra asociación.