Pagar por varias suscripciones al mes se ha convertido en una realidad cotidiana para muchos ciudadanos de a pie. Por eso, no es de extrañar que este modelo de negocio haya trascendido el entretenimiento para convertirse en el valor diferencial de numerosos negocios de la restauración, la cosmética, la industria textil o la automoción, entre otros sectores. En este sentido, el Índice de la Economía de la Suscripción, impulsado por la plataforma Zuora, destacó el pasado marzo que dichas empresas han experimentado tasas de crecimiento “3,7 veces más rápidas que el S&P 500 en los últimos once años”.
“No hace mucho escuché al presidente de Volkswagen decir que el futuro de la marca pasa por alquilar coches, no por venderlos”, reflexiona Manuel Alonso, responsable de Consultoría en Autocar. Precisamente, esa filosofía es similar a la que su matriz, Reybesa, aplica al alquiler de carretillas industriales desde hace tiempo. Se trata de un servicio por el que ofrece vehículos de la marca Linde a empresas que las necesiten de forma puntual, al tiempo que se encarga de su manutención y reparación.
Las reflexiones estratégicas de esta firma con sede en Orkoien le llevaron hace tres años a adentrarse en el mercado de los vehículos de guiado automático (AGV, por sus siglas en inglés), unas máquinas de nueva generación llamadas a automatizar los procesos logísticos. “La automoción fue el primer sector en vislumbrar las oportunidades de esta tecnología. Pero ya se puede aplicar a todo tipo de industria y en empresas de cualquier tamaño. Por eso, vimos que iban a crecer cada vez más hasta sustituir en algunos casos a las carretillas de alquiler”, apunta a Navarra Capital el gerente de Autocar, Diego Redín.
Diego Redín: “La automoción fue el primer sector en vislumbrar las oportunidades de los AGV, pero es una tecnología que se puede aplicar a todo tipo de industria y a empresas de cualquier tamaño”
De ahí que la propiedad de Reybesa decidiera contactar en 2021 con Alonso para focalizar su filial en proyectos de transformación industrial a través del alquiler de AGV. Entonces, la firma comenzó su actividad con siete personas provenientes de Reybesa. En la actualidad, Autocar ya trabaja para ocho clientes, entre los que se encuentran Volkswagen Navarra, Berry Superfos, Cinfa, Viscofan, Plastic Omnium o Grupo IAN. Un crecimiento que le ha permitido crear otros dieciséis puestos de trabajo hasta alcanzar los veintitrés.
“En estos momentos, buscamos consolidar nuestro conocimiento mientras trabajamos para empresas de todos los tamaños en Navarra, donde somos capaces de llegar personalmente y dar un servicio de calidad. Vamos contratando a más personas y ampliando nuestras capacidades en función de los proyectos que entran. Pero ya nos están demandando servicios desde otras regiones de España y desde el extranjero, mucho más allá de donde ahora se centra nuestro plan. Por ejemplo, un gran proyecto nos permitirá dar el salto a Aragón en breve”, incide Alonso.
En línea con el aumento de su actividad, la firma adquirió recientemente 6.000 metros cuadrados en el polígono Arazuri-Orkoien, “a unos 500 metros de las oficinas centrales de Reybesa”. Allí proyecta construir una fábrica para ensamblar y personalizar los equipos de las tres marcas con las que opera: Linde, HikRobotics y VisionNav. Al mismo tiempo, la sede contará con oficinas técnicas y de asistencia, un área de validación del vehículo y un showroom para sus productos.
“Empezaremos las obras este año y el objetivo es que esté hecha en año y medio para inaugurarla en 2025. La inversión será de aproximadamente 5 millones de euros. En concreto, llevaremos a cabo no solo la fabricación de equipos, sino también su transformación de las estructuras y del software según las necesidades de cada proyecto. Por supuesto, crearemos empleo conforme entren más iniciativas”, celebra Redín.
INDUSTRIA 5.0
Los AGV están impulsando la implementación de la industria 5.0, una etapa en la evolución de los procesos industriales que pone el foco en “en la interacción de las personas y las máquinas”. “Cuando la máquina es capaz de actuar bajo ciertos criterios, se puede hablar de un tipo de inteligencia. Esto permite que los equipos puedan guardar paquetes en estanterías sin que alguien esté mirando si el palé está bien puesto, o detectar si un bulto está torcido para reconducir su trayecto sin necesidad de reprogramación, coger esa carga e incorporarse al flujo normal”, señala Alonso.
De hecho, la plantilla de Autocar se está formando en estos momentos para manejar AGV con visión e inteligencia artificial, dos capacidades que permiten al vehículo diferenciar entre humanos y otras máquinas. “De esta forma, los equipos aumentan la eficiencia y la seguridad en las fábricas, al tiempo que se disminuyen los errores. La visión combinada con la IA es un salto tecnológico claro en la seguridad que, al tiempo, se considerará en Europa como un requisito más”, concluye el responsable de Consultoría en la firma.
Precisamente, esta es una de las novedades que Reybesa presentará en una jornada de puertas abiertas que celebrará el próximo 6 de octubre en sus instalaciones de Orkoien. Será, según informó la empresa navarra, una oportunidad “para conectar con expertos de la industria y compartir conocimiento”, así como para “descubrir, ver y probar todas las novedades de equipos de manutención, robótica aplicada a la logística y seguridad”.