El interés de los compradores extranjeros por hacerse con una vivienda en España “ha vuelto tras caer las restricciones de la pandemia“. Pero además de los grandes mercados que tradicionalmente más atraen a los foráneos, son muchos los compradores que “han puesto el ojo en pequeños pueblos del interior donde establecer su primera o segunda residencia, aunque sin alejarse demasiado del mar ni de las zonas de influencia de sus compatriotas”.
Según un estudio realizado por Idealista, Ciudad Quesada (Alicante) es el municipio no costero de menos de 5.000 habitantes en el que se registra un mayor volumen de búsquedas de vivienda en venta desde el extranjero. El segundo pueblo está situado también en la provincia de Alicante: Busot. El pódium de pequeñas localidades interesantes para extranjeros se completa con la urbanización Ciudalcampo, en la Comunidad de Madrid.
En cuarto lugar encontramos El Verger (Alicante), seguido por Fuente Obejuna (Córdoba), Ojén (Málaga), Formentera del Segura (Alicante), Palma de Gandía (Valencia), Viñuela (Málaga) y Montuiri (Baleares), que se sitúa en décima posición.
También en la Comunidad Valenciana está Villalonga (Valencia) que se sitúa en decimoprimer lugar, y Olivella, en Barcelona, que está en el decimosegundo puesto y es el primero en Cataluña. Les siguen Almogía (Málaga), Tanque (Santa Cruz de Tenerife), Algorfa (Alicante), Sineu (Baleares), Turre (Almería), Montroy (Valencia), Puigpunyent (Baleares) y Moralet (Alicante).
El estudio ofrece también el pueblo más visitado en cada una de las provincias españolas que, “aunque en muchos casos están lejos del interés suscitado en provincias como Alicante o Málaga, sí son relevantes para los mercados locales”. Ese es el caso de Navarra, donde la localidad que más interés despierta es Bera.